En el corazón de Europa, un grupo de especialistas lleva adelante un experimento único. Su objetivo es entender qué pasa en la Tierra justo antes de que una falla tectónica se rompa y genere una catástrofe. La idea es aprender a leer las pistas que da la naturaleza.
Un experimento en la montaña: así provocan sismos para aprender a predecir terremotos
Un equipo de científicos decidió ir un paso más allá. En un novedoso experimento, desatan pequeños temblores para estudiar las señales previas
Para lograrlo, los científicos no se sientan a esperar que la tierra tiemble. Ellos mismos provocan pequeños terremotos de forma controlada. Es una manera activa de buscar las respuestas que podrían salvar vidas en el futuro.
¿Qué buscan bajo tierra?
El experimento se basa en provocar pequeños terremotos para revisar qué sucede en los instantes anteriores.
Este proyecto se desarrolla en las profundidades de los Alpes. Allí, los investigadores montaron un laboratorio subterráneo para poder trabajar directamente sobre una falla. El lugar les permite aislar los fenómenos que quieren estudiar sin interferencias externas.
La tarea principal del experimento es simple en su concepto pero compleja en su ejecución. El equipo genera fracturas en la roca para ver cómo se comporta el terreno. Buscan patrones o señales que se repitan justo antes de que ocurra uno de estos pequeños sismos inducidos.
Estos especialistas quieren saber si existen indicadores claros que alerten sobre la inminencia de un temblor. El experimento permite registrar datos precisos en tiempo real, algo imposible de hacer mientras se espera un gran terremoto natural.
La información recolectada es muy valiosa. Ayuda a los científicos a mejorar la forma en que se monitorean las fallas geológicas activas en todo el mundo. El conocimiento que surja de los Alpes podría aplicarse en otras zonas sísmicas.
Los científicos controlan con recelo los resultados de los movimientos sísmicos.
Un experimento con base en los Alpes
El lugar elegido para esta iniciativa es el Laboratorio Subterráneo de Geociencias y Geoenergías de Bedretto. Este centro de investigación proporciona las condiciones perfectas para un experimento de esta magnitud.
Los científicos involucrados en el proyecto creen que entender cómo se preparan los terremotos es fundamental. Su trabajo se enfoca en la etapa previa a la ruptura de una falla, un momento lleno de interrogantes para la ciencia.
Provocar microsismos les da un control que la observación pasiva no permite. De esta forma, pueden probar diferentes hipótesis sobre cómo se acumula y libera la tensión en la corteza terrestre.






