Al momento de realizar cualquier procedimiento o truco con vinagre, es importante leer bien las etiquetas y elegir el vinagre con el ácido y la intensidad acordes para cada material. Puedes optar por un vinagre suave de manzana o un vinagre intenso de limpieza para realizar una limpieza profunda.
Por qué hay que lavar las ollas con vinagre: ¿qué significa?
El vinagre blanco es un producto desengrasante, natural y efectivo. Se puede usar para tipos de truco con vinagre en las ollas: sirve para eliminar la grasa y para limpiar el sarro.
Para limpiar los pegotes de las ollas, simplemente debes añadir una taza de vinagre en el interior y llevarla al fuego. Una vez que hierva, deja que el vinagre se enfríe y frota suavemente para retirar las quemaduras y pegotes.
Si deseas limpiar los restos de cal o sarro de las ollas, lo mejor es dejarlas en remojo con una solución de agua y vinagre blanco durante algunas horas. Este truco es muy bueno para limpiar las ollas o jarros donde hervimos los huevos, ya que el sarro en el metal puede afectar la cocción de los huevos.
Un truco y algo más: consejos para mantener tus ollas limpias y nuevas por más tiempo
El cuidado de las ollas y sartenes depende del material. Para limpiar estos elementos de la cocina no puedes utilizar el mismo ingrediente. A continuación te dejo un truco o consejo para limpiar y mantener cada tipo de olla común.
- Para limpiar y cuidar ollas de acero inoxidable, lo ideal es evitar las esponjas de metal o los polvos de limpieza que pueden rayar el material. Utiliza detergente y agua caliente para ablandar los pegotes y evita ácidos para lavarlas, el vinagre o el limón en exceso pueden dañar el revestimiento.
- Para limpiar ollas de aluminio, lo mejor es evitar el lavavajillas y lavarlas siempre a mano. Seca las ollas luego de cada lavado y no dejes la comida por mucho tiempo en el interior. Algunas salsas o alimentos puedes decolorar el material. Cocina siempre con cucharas de madera o plástico sin bordes afilados.
- Si tienes ollas de hierro fundido, lo mejor es lavarlas con esponjas duras de acero y con muy poco detergente. Para limpiar este material se puede realizar un truco con sal. Espolvorea el ingrediente en el hierro y remueve la grasa con ayuda de una servilleta de papel.