La encerró en su casa de Tunuyán. La golpeó ferozmente. La obligó a tomar te de ruda para producirle un aborto. Casi la mata. Esta grave secuencia de violencia de género es la que le acusan a un joven de 21 años y que, según se definió este miércoles, se ventilará en un juicio donde podría ser condenado hasta 31 años de cárcel.
Tiene 21 años, está acusado de hacerle tomar té de ruda a su novia para abortar y arriesga más de 30 años de pena
Agustín Espósito enfrentará un juicio acusado por graves delitos de violencia de género: tentativa de femicidio, privación de la libertad y aborto
Por segunda vez, una jueza consideró que está listo para el debate el expediente de violencia de género que nació en la madrugada del 3 de junio de 2025, cuando una chica de 18 años ingresó a terapia intensiva del Hospital Scaravelli con graves lesiones que derivaron en un aborto espontáneo -ver más abajo-.
El peluquero Agustín Espósito Veliz (21) está imputado por graves delitos: tentativa de homicidio agravado por el vínculo -femicidio- y por mediar violencia de género, privación ilegítima de la libertad agravar por ser cometida con violencia y aborto. Según esta acusación que dispuso la fiscal Eugenia Gómez, arriesga una potencial condena de entre 10 y 31 años de cárcel.
La oposición del defensor, Diego Rozzi, no era en busca de evitar el juicio pero sí intentando que sea con una calificación más benévola: sólamente lesiones leves agravadas. Según la postura del abogado, la vida de la víctima nunca estuvo en riesgo y el aborto se produjo porque la joven se desmayó y cayó al suelo, no por los presuntos golpes que recibió. Pero esta teoría fue descartada en primera y segunda instancia, el miércoles pasado, por la jueza Laura Guajardo.
Violencia de género extrema
La investigación sostiene que todo ocurrió en la noche del 3 de junio pasado, en un domicilio ubicado en el barrio Margarita Graciela, en Tunuyán. Allí viven los padres de Agustín Espósito, quien también convivía con su novia de 18 años, pese a que meses atrás lo había denunciado por violencia de género y había una prohibición de acercamiento.
Según relató la víctima, en un momento le recriminó a su novio que dejara de fumar ya que ella estaba cursando un embarazo de 6 semanas. Comenzó una discusión donde el joven se tornó violento. La chica quiso llamar a su madre para pedirle auxilio, pero Agustín Espósito le quitó el teléfono celular y lo destrozó contra una pared.
Luego la encerró en la habitación y le propinó 17 golpes, entre piñas y patadas, según determinó el informe del Cuerpo Médico Forense (CMF). La acusación sostiene que el agresor preparó un té de ruda y obligó a su pareja a que lo tome para abortar el embarazo.
El episodio de violencia de género se extendió hasta las 5.30, cuando la víctima comenzó a vomitar sangre y se descompensó. El acusado y su madre la llevaron hasta el Hospital Scaravelli. En ese nosocomio estuvo 17 días internada en terapia intensiva y finalmente perdió el embarazo producto de la hemorragia interna que tenía la víctima de violencia de género.





