La mayoría de los huracanes que han causado desastres en todo el mundo, en medio de las diferentes tormentas tropicales, se han asociado a nombres de mujer. Especialistas revelaron que se trata de una medida, para muchos, muy polémica.
Revelaron que después de 1978, se procedió a llamar a los huracanes también con nombres de hombres y no solamente de mujeres.
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Si hay que nombrar ciclones tropicales que quedaron en la historia, desafiaron todo tipo de pronóstico del tiempo y que tienen nombre del género femenino, son:
- Audrey (1957)
- Dolly (1996)
- Katrina (2005)
- Patricia (2015)
- Hanna (2020)
¿Pero por qué se usa nombres de mujer para llamar a los huracanes o ciclones tropicales? ¿Cuál es la explicación que tiene llamar a estos fenómenos asociados al desastre, con nombre de mujer?
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Revelaron por qué la mayoría de los huracanes tienen nombres de mujer
Los que más saben, señalan que esta práctica de colocarle nombre de mujer a los huracanes, se remonta a inicios de la década del ’50.
En esa época, se les colocaba a los huracanes el nombre del santo del día, como Santa Ana (1825) y San Felipe (1928).
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El meteorólogo Clement Wragge fue quien rompió la tradición y le colocó, en el Siglo XIX, un nombre propio a un huracán y no el de un santo.
Primero empezó usando nombres sin criterio alguno, para luego pasar a llamar a los huracanes con nombre de mujer.
Y a partir de 1953, se convirtió en un hábito para los pronosticadores de todo el mundo, especialmente los estadounidenses, en seguir con esta costumbre, bautizando varios de los huracanes más importantes y desastrosos de la historia.
Un artículo del diario The New York Times detalla que, así como se llamaba con nombres femeninos a las embarcaciones, lo mismo se hacía con los huracanes.
Sin embargo, a partir de 1978, se comenzó a usar nombres masculinos e fueron intercalados con los femeninos.
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El cambio no fue casualidad, ya que hubo muchas protestas por parte de mujeres, a principios de la década de los ’70, que no estaban para nada de acuerdo con que se nombrara con pronombres de mujeres, a estos fenómenos asociados al desastre.