Es una opción súper económica y fácil de realizar. No gastarás un peso de más en un nuevo colgador de ropa.
Pileta Pelopincho.jpg
Pileta Pelopincho en su época de mayor uso
Cómo transformar una pileta en un tender de ropa
La estructura de la Pelopincho es resistente, espaciosa y permite colgar sábanas, toallas y ropa pesada sin que se deformen las varillas, a diferencia de muchos tenders modernos.
El truco es muy simple y económico, solo necesitarás tener idea sobre como funciona las leyes del reciclaje. Esto quiere decir, darle una segunda vida a objetos viejos o con poco uso como una pileta en invierno y aprovechar al máximo su estructura:
El paso a paso:
Primero que nada, lo importante es que no desarmes la estructura, ya que usarás el esqueleto metálico de la Pelopincho sin la lona, o bien, si está seca y limpia, deja la lona puesta como base.
Pileta Pelopincho reciclada y convertida en un tender para la ropa.jpg
No gastes más plata en comprar objetos para colgar la ropa. Donde muere una pileta nace un tender, ideal para el invierno
Luego tendrás que colgar cuerdas o sogas resistentes, pasándolas de un lado al otro de la pileta, a la altura que prefieras. Cuanto más tupido el entrecruzado, más ropa vas a poder colgar.
Deberás buscar una ubicación estratégica si hay sol puedes colocarla en el patio, galería o balcón. Si tienes un espacio techado o semicubierto, también. De esta forma la ropa se secará más rápido y sin mojarse en caso de lluvia.
Vas a necesitar agregarle ganchos o broches de ropa. Puedes usar los mismos que en un tender común, los que ya tienes en casa e incluso puedes colgar perchas para camisas o prendas delicadas.
Cuando hace frío se hace difícil secar la ropa por la falta de sol o la humedad ambiente. Esta opción de reciclaje permite ventilar bien las prendas y evitar que queden con olor a encierro o humedad, como suele pasar cuando se seca dentro de casa.