El vinagre se descubrió hace muchos años por accidente, cuando un vino tinto de uva fermentó de más y entró en contacto con el oxígeno del ambiente. Desde entonces y hace miles de años, el vinagre es utilizado como aderezo, desengrasante, plaguicida y leudante.
Hoy te voy a explicar qué significa la técnica del vinagre y la albahaca y por qué deberías poner en práctica este truco. Toma nota y presta mucha atención.
El vinagre contiene ácido acético, un compuesto abrasivo que se produce por el contacto y reacción entre el metanol y el monóxido de carbono.
Esta sustancia se produce de manera natural cuando los las bacterias presentes en el alimento fermentan los azúcares y almidones. De esta manera se fabrican los vinagres de consumo como el de manzana, vino, arroz y jerez, tan populares en el hogar.
Si te preguntas qué significa esta técnica y para qué puedes utilizarla en el hogar, la respuesta es bastante sencilla. Combinar vinagre de vino con albahaca es un viejo truco de cocina que se realiza para saborizar el vinagre y darle un toque fresco a las ensaladas.
La mezcla de vinagre con hierbas aromáticas da como resultado un condimento intenso, rico y fresco. Para realizar este truco de cocina, simplemente debes colocar vinagre de vino o manzana en un frasco con algunas hojas de albahaca y dejar reposar por unas horas.
Esta mezcla es perfecta para marinar carnes, condimentar ensaladas, aumentar el sabor de las salsas y crear aderezos únicos. La albahaca libera sus sabores por efecto del ácido del vinagre y ambos se combinan potenciando el sabor del otro.
El vinagre se puede mezclar con otras hierbas como tomillo, romero y orégano. No te olvides de leer bien las etiquetas antes de preparar el condimento de vinagre y asegurar que sea apto para consumo humano.