Pocas personas lo saben y alguna vez se lo han imaginado, pero lo cierto es que la mezcla entre la miel y las cáscaras de limón pueden ser altamente beneficiosa para la salud general y la piel. A continuación, se explicará como utilizarla.
Pocas personas lo saben y alguna vez se lo han imaginado, pero lo cierto es que la mezcla entre la miel y las cáscaras de limón pueden ser altamente beneficiosa para la salud general y la piel. A continuación, se explicará como utilizarla.
La combinación entre las cáscaras de limón y la miel es beneficiosa porque aporta antioxidantes, vitaminas y fibra, además de propiedades antibacterianas, antifúngicas y relajantes.
La combinación de miel y limón en agua caliente es un remedio reconfortante para calmar el dolor de garganta y puede ayudar a aliviar la tos. En forma de infusión, esta mezcla puede favorecer la digestión, estimulando la secreción de bilis y jugos gástricos.
El limón aporta vitamina C y otros nutrientes, mientras que la miel es un antioxidante natural, y ambos pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunitario protegiendo el cuerpo.
Como si lo dicho fuese poco, tienes que saber que beber esta mezcla puede aumentar la ingesta diaria de líquidos, lo que es esencial para la hidratación general del organismo.
Para lograr estos beneficios, puedes hacer una infusión de limón con miel para tomarla caliente. Hierve agua, añade el jugo de medio limón y un chorro de miel, y remueve bien hasta que se disuelva.
Ya lo sabes, si quieres calmar la tos y el dolor de garganta, fortalecer la digestión y tus defensas, y ganar otros beneficios, todo lo que tienes que hacer es recurrir a la mezcla de cáscaras de limón con miel.
Además de los beneficios para la salud, esta mezcla de miel con cáscara de limón puede utilizarse como mascarilla para la piel. El limón ayuda a eliminar células muertas y a aclarar el cutis, mientras que la miel actúa como un agente antibacteriano y antioxidante.
Justamente, al combinar sus propiedades, tanto la miel como las cáscaras de limón pueden crear una piel más luminosa, con una textura apropiada para combatir algunas imperfecciones.