Tanto la miel como el bicarbonato de sodio son dos de los elementos de los más utilizados en el mundo de lo casero. Lo que muchas personas no saben, es que la mezcla entre ambos puede ser utilizada con un beneficio en particular.
Tanto la miel como el bicarbonato de sodio son dos de los elementos de los más utilizados en el mundo de lo casero. Lo que muchas personas no saben, es que la mezcla entre ambos puede ser utilizada con un beneficio en particular.
El bicarbonato de sodio mezclado con la miel puede ser un efectivo remedio casero para la garganta, en tanto que también puede ser utilizado para distintos tratamientos en la piel.
Haciendo énfasis específicamente en el cuidado de la piel, hay que decir que la miel y el bicarbonato de sodio son una mezcla ideal para realizar la exfoliación.
El bicarbonato de sodio ayuda a eliminar las células muertas de la piel, dejándola más suave y luminosa. Por su parte, la miel es un humectante natural que ayuda con todo lo que tiene que ver con la hidratación de la piel.
La mezcla de miel y bicarbonato puede ayudar a aclarar manchas oscuras y a unificar el tono de la piel, y al mismo tiempo puede ayudar a controlar el acné.
La miel y el bicarbonato de sodio también pueden ayudar a reducir la irritación en algunas partes del cuerpo y, por último, otro de los beneficios de esta mezcla es el de eliminar impurezas y bacterias.
Ya lo sabes, mezclar miel con bicarbonato de sodio puede darte grandes beneficios para tu piel. Sin embargo, debes de tener en cuenta las siguientes consideraciones.