Antes se creía que las placas del océano solo se deformaban en los bordes donde chocaban y se hundían en el manto terrestre (zonas de subducción). Sin embargo, nuevas pruebas muestran que ciertas áreas del fondo marino, llamadas mesetas oceánicas, pueden estirarse y deformarse mientras las placas se mueven. Esto significa que la deformación dentro de las placas oceánicas es más común de lo que se pensaba y está relacionada con los procesos que ocurren en el océano Pacífico occidental.
¿Cuáles son las implicaciones de que el fondo del océano se abra en dos?
Las recién descubiertas en el océano pacífico fallas submarinas se ubican en extensas mesetas suboceánicas, vastas áreas planas bajo el mar que se formaron hace millones de años. Este fenómeno tuvo lugar cuando la roca fundida del manto terrestre emergió hacia el lecho marino.
Los investigadores han determinado que las tensiones acumuladas en estas placas pueden provocar movimientos bruscos en el planeta Tierra, aumentando el riesgo de terremotos y tsunamis en regiones costeras cercanas. Así mismo, proteger la vida humana y los ecosistemas marinos, que podrían enfrentar impactos severos debido a estos fenómenos, demandará una cooperación internacional efectiva.