La elección del momento ideal para realizar ejercicio es una pregunta recurrente que va más allá de la disponibilidad personal, ya que está estrechamente ligada a cómo el cuerpo metaboliza la energía a lo largo del día. Determinar el horario más efectivo para el entrenamiento, según la ciencia, dependerá del objetivo perseguido. Aunque, hay una franja temporal puntual en la cual se sugiere desarrollar actividad física.
Lo dice la ciencia: este es el mejor momento del día para hacer ejercicio
De acuerdo a especialistas, quienes buscan bajar de peso y quemar una mayor cantidad de calorías deberán hacer ejercicio durante la mañana. Los estudios sugieren que entrenar por la mañana, especialmente en ayunas, presenta una ventaja significativa cuando el objetivo principal es la oxidación de grasas.
La explicación que brinda la ciencia es que, durante la noche, los niveles de glucógeno (reservas de carbohidratos) están más bajos. Al ejercitarse antes de ingerir alimentos, el cuerpo se ve obligado a recurrir a las reservas de grasa como principal fuente de energía. Este fenómeno biológico maximiza la quema de lípidos y resulta altamente efectivo para la pérdida de peso y la definición muscular.
En paralelo, los profesionales señalan que al entrenar durante la mañana promovemos la liberación de endorfinas, lo cual mejora el estado de ánimo, al mismo tiempo que fortalece la autoestima y llenándonos de energías para lo que resta del día.
Lo único a considerar al momento de realizar ejercicio en la mañana es que el entrenamiento matutino puede percibirse como más demandante y puede no ser ideal para rutinas de alta intensidad y larga duración, ya que la disponibilidad de glucógeno (carburante rápido) es limitada.
Esta no es la única opción para realizar un entrenamiento beneficioso ya que, por otro lado, la ciencia señala que el entrenamiento al final del día ofrece ventajas notables en términos de rendimiento general y potencia.
La explicación radica en que durante la tarde/noche, la función pulmonar está en su punto más eficiente y los niveles hormonales, como el cortisol, están más bajos que en la mañana. Esto se traduce en una mayor capacidad para levantar pesos más pesados, alcanzar mayores velocidades y tolerar ejercicios de alta intensidad (HIIT). Además, en este momento del día habrá una mayor flexibilidad.






