El ausentismo escolar creció 5 puntos después de la pandemia en Mendoza.
En Mendoza, el ausentismo escolar creció en 5 puntos, comparando el último año de clases con el anterior a la pandemia.
Así, mientras en el 2019 el ausentismo fue del 13%, en el 2022, los chicos de los tres niveles de enseñanza obligatoria faltaron el 18% del total de los días de clases. Los más preocupantes son los Niveles inicial y Primario
Según datos relevados por la DGE, si bien hay un alto porcentaje de ausentismo en los tres niveles de la enseñanza obligatoria, los más complicados son los primeros del sistema.
Así, el nivel de ausentismo escolar del Jardín de Infantes en Mendoza es del 25% del total de los días de clases.
En salita de 4 y 5 años, el incremento con respecto a la prepandemia fue de 7 puntos, ya que en el 2019 el ausentismo fue del 18%
La situación del Nivel Primario no dista mucho del anterior. Los chicos de entre 1° y 7° grado faltaron el 13% de los días de clases durante el 2019, mientras que en el 2022, el ausentismo fue del 19%. En total, creció 6 puntos.
En la Secundaria los números bajan, pero hay que tener en cuenta que son más estrictos: los chicos con más de 15 inasistencias injustificadas se quedan libres.
Por este motivo, en los secundarios técnicos y orientados, en el 2019 los chicos faltaron el 10% de los días de clases. Mientras que en el 2022 lo hicieron en el 12%. El incremento fue de 2 puntos porcentajes en cada caso.
La licenciada Romina Durán, directora de Evaluación de la Calidad Educativa de la DGE, explicó que están trabajando en función de fortalecer una triada básica para bajar el ausentismo escolar: primero que las escuelas se encuentren abiertas, segundo que los docentes estén en la escuela y tercero que los padres envíen los chicos a clases.
En cuanto al último aspecto, es decir, el hecho de que muchos padres no envían a los chicos a la escuela, Durán explicó que en el 2022 comenzó una investigación en base a dos iniciativas.
En primer lugar, comenzaron a enviar mensajes de alerta a los padres cuyos chicos faltaban mucho a clases.
Los mensajes se enviaban cada 15 días, puntualizando la cantidad de jornadas que el niño no había ido a la escuela.
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La otra iniciativa fue la de hacerles llegar a los padres recomendaciones, explicándoles por qué es importante que los chicos asistan regularmente a clases.
por un lado la necesidad de que las escuelas estén abiertas, por otro lado que los docentes estén en las escuelas, que los padres lleven a los chicos a las clases
Según Durán, el resultado de esta investigación se está procesando y los datos serán compartidos en los próximos días por la DGE.
En cuanto al alto porcentaje de chicos que faltan a la salita de 4 y 5 años, la directora de Evaluación explicó que este fue uno de los argumentos para elegir las escuelas en las que se implementó el programa 100 salas.
"Para elegir esas 100 salas tomamos indicadores de alfabetización y de ausentismo lo que se hizo fue agregarles esa hora extra a jardines que estaban asociados a escuelas primarias para equiparar el horario de ingreso de la primaria y del jardín".
Esto según la funcionaria, fue para traccionar la presencialidad desde la escuela primaria hacia el Nivel Inicial, ya que en muchos casos resulta contraproducente que los chicos comiencen la jornada escolar en distintos horarios