La histórica fábrica de copetines Gonzalo salió a subasta online con un precio base de $280 millones. El paquete incluye dos inmuebles en Dorrego, maquinaria de producción, un vehículo utilitario y la marca comercial.
Los interesados pueden ofertar hasta el viernes 7 de noviembre a las 11, a través de la plataforma Superbid (link). Entre medio, habrá una visita de exhibición el miércoles 29 de octubre de 9 a 12.
Qué incluye el remate de la fábrica Gonzalo
El primer inmueble está ubicado en calle Berutti 182, Dorrego, Guaymallén. Tiene 283 metros cuadrados y cuenta con toda la maquinaria para la producción de copetines. También se incluye un utilitario Fiorino con el lateral izquierdo dañado.
El segundo inmueble se encuentra en calle Juan Agustín Maza 796, también en Dorrego, y cuenta con una superficie de 233 metros cuadrados. Sin embargo, este presenta una particularidad: no tiene escritura definitiva.
La martillera pública María Manucha, encargada de la operación, aclaró que el inmueble fue donado a Gonzalo Artículos de Copetín SRL mediante escritura aceptada, pero no se presentó el plano final de obra ante la Municipalidad de Guaymallén.
"El comprador en subasta tiene a su cargo la terminación del trámite correspondiente ante la Municipalidad de Guaymallén", advirtió Manucha en el sitio oficial de Superbid.
La marca comercial también forma parte del paquete a rematar.
Cómo participar de la subasta de la fábrica Gonzalo
Los interesados pueden presentar sus ofertas únicamente de forma online en el siguiente link.
Una vez que finalice el plazo, el oferente ganador deberá concretar el pago en 3 días hábiles por transferencia o depósito.
Para realizar consultas, en la plataforma Superbid -la utilizada para llevar adelante el remate- explicaron que las vías de comunicación son las siguientes:
- Celular: +549 2615521623
- Correo electrónico: [email protected]
- Web: www.manuchasubastas.com.ar
La voz de los ex trabajadores de la fábrica Gonzalo
Luego del anuncio de la quiebra de la fábrica Gonzalo en diciembre pasado, 25 familias quedaron en la calle e incluso hablaron de formar una cooperativa para poder continuar con sus fuentes de ingresos, que finalmente no se concretó.
"La cooperativa se iba a formar pero muchos no estaban de acuerdo, algunos decían una cosa, otros decían otra y se terminó disolviendo", explicó Walter Manrique ex trabajador de la empresa.
Además, agradeció al Segundo Juzgado de Procesos Concursales de Mendoza por la "celeridad" de la quiebra.
Con respecto al monto del remate y la indemnización de los trabajadores aclaró que la base del remate "no cubre ni la mitad de lo que tenemos que tener para que cobremos toda la indemnización entera".







