De hace más de 6.000 años

La bodega más antigua del mundo está en Armenia

Por UNO

Arqueólogos hallaron en una cueva en Armenia la bodega de vino más antigua del mundo, lo que prueba que los humanos fermentaban uvas desde la Edad de Cobre, hace más de 6.000 años.

Te puede interesar: Cómo es la situación sentimental de cada actor de La Casa de Papel

La caverna, llamada Areni-1, está cerca de un pequeño poblado armenio aún conocido por su actividad vitícola.

En el mismo lugar se encontró en junio de 2010 un mocasín de cuero perfectamente preservado que se remontaba a 5.500 años atrás. Es el zapato más viejo conocido hasta ahora.

 Embed      

La caverna se halla en una profunda garganta en la provincia armenia de Vayotz Dzor, que tiene fronteras con Irán y Turquía. Previo a este descubrimiento, los últimos vestigios de equipos de producción de vino que se conocían se remontaban a 5.150 años atrás.

Es la primera vez que tenemos una imagen arqueológica completa de una producción de vino de 6.100 años de antigüedad”, señala Gregory Areshian, responsable de las excavaciones y director adjunto del Instituto de Arqueología Cotsen de la Universidad de California, en Los Ángeles, EE.UU.

Te puede interesar: La noche que un monstruo de 13 años tiñó de sangre

Se trata de la unidad de producción de vino más antigua que se haya descubierto hasta el momento, con su prensa, sus cubas de fermentación y sus vasijas para el almacenamiento”, indica a su vez Hans Barnard, principal autor de un artículo sobre el estudio, publicado en el Journal of Archaeological Science.

Los equipos para la vinificación fueron descubiertos en este sitio de 700 metros cuadrados entre decenas de tumbas, lo que hace pensar que el vino podría haber jugado un papel ceremonial.

Entre los objetos hallados figuran semillas de uva, restos de uvas pisadas, sarmientos atrofiados de vid y una cuba de arcilla aparentemente utilizada para la fermentación y que podía contener hasta 54 litros.

 Embed      

Hasta el siglo XIX, en toda la cuenca mediterránea y el Cáucaso, se utilizaban instalaciones similares para exprimir la uva, explica Gregory Areshian. Las uvas eran pisadas con los pies, como se hizo durante mucho tiempo en todas las regiones de producción vitícola, precisa.

Además de estos equipos, los arqueólogos excavaron trozos de cerámica impregnada de vino, una taza cilíndrica hecha con el cuerno de un animal indeterminado y un cuenco de arcilla para beber, entre otros. Los paleobotánicos analizaron las semillas de uva descubiertas en el lugar y determinaron que pertenecen a la especie Vitus vinifera, variedad de vid doméstica que aún hoy se cultiva. Los arqueólogos piensan que los habitantes de estas regiones no debían utilizar el vino sólo en las ceremonias, sino también para beberlo en la caverna.

Pero aún no descubrieron vestigios de tales actividades. Los rastros químicos apuntan a jugo de uva y, dada la falta de refrigeración, el jugo se habría fermentado para convertirse en vino, dijo Areshian. “También sabemos que todavía, en los pueblos de la zona, la cultura del vino es muy antigua y tradicional”, declaró. Los vinos producidos en el lugar son Merlot y Cabernet Sauvignon, agregó.

Temas relacionados: