Existen varios elementos caseros que pueden ayudar a reducir el mal olor corporal y actuar como alternativas al desodorante tradicional. Más allá de lo casero, esta preparación se presenta como una alternativa económica para lograr aromatizar tu cuerpo de manera sencilla.
Adiós al desodorante: la mezcla de pocos ingredientes con la que aromatizar tu piel
El desodorante comercial puede ser reemplazado con una mezcla de pocos ingredientes para dejar atrás los malos olores. ¿Cómo realizarlo?
Para realizar este desodorante casero, debes acudir a una mezcla de tres ingredientes particulares: el bicarbonato de sodio, un aceite esencial de tu preferencia y la maicena.
Cómo realizar un desodorante casero con una sencilla mezcla
El bicarbonato de sodio y la maicena son ingredientes populares para desodorantes caseros debido a sus propiedades para combatir el mal olor y la humedad, respectivamente.
En esta mezcla, el bicarbonato de sodio neutraliza los olores, mientras que la maicena absorbe la humedad, creando un ambiente menos propicio para el crecimiento bacteriano que causa el mal olor.
A la hora de probar este desodorante, será mejor que realices una prueba antialérgica para descartar cualquier tipo de problema o infección a futuro. Si notas irritación, será mejor que no realices nada.
Tanto si eres un habitual de la cosmética natural como si te estás aficionando a ella, esta sencilla mezcla te va a resultar verdaderamente útil para ampliar tu lista de productos naturales elaborados en casa. Para realizarla, deberás contar con los siguientes ingredientes:
- ½ taza de Bicarbonato de Sodio.
- ½ taza de maicena.
- 4 cucharadas de aceite de coco orgánico.
- 1 cucharadita de aceite esencial de árbol de té.
- ¡Opcional! Una cucharadita de algún aceite esencial para proporcionar aroma. Por ejemplo, lavanda.
Paso a paso: cómo crear este efectivo desodorante natural
- Mezcla en un recipiente el bicarbonato de sodio con la maicena.
- Calienta el aceite de coco para que se derrita. Después, y con cuidado, agrégalo a la anterior mezcla.
- Añade las cucharaditas de aceite de árbol de té y de aceite esencial (si has optado por emplear alguno).
- Remueve muy bien y coloca la mezcla en un tarro de vidrio con tapa.
- Deja reposar el compuesto en un lugar fresco y seco. Una vez frío, ya podrás utilizar tu desodorante casero.





