Abrió en Mendoza una fábrica de chocolates hecha por sus propios dueños. Ellos son Marcelo San Martín y Viviana Asís, quienes con sus propias manos construyeron cada rincón de su Fábrica en Sierras de Encalada, denominada Chocolates y Maderas.
"Mendoza no tiene mucha actividad chocolatera y se puede hacer muchísimo más. Nosotros llevamos el chocolate más desde lo filosófico que desde lo comercial. Y hemos construido nuestra fábrica nosotros mismos", agregó el experimentado fabricante.
Marcelo tiene 55 años y junto a su esposa Viviana hace una década se dedican a la fabricación de chocolate artesanal. Entre sus creaciones se destacan 150 productos y desde hace muchos meses estaban trabajando en la construcción de la llamativa sede de su chocolatería -con fábrica incluida-.
"Estamos felices de haber terminado de construir la fábrica. Es toda de madera y tiene decoraciones celtas, de cada una de las regiones, para hacer honor a la sangre de Galicia que tengo", destacó con humildad entre la madera y el aserrín.
En el lugar, además de fabricar el chocolate, se encargan de los rellenos, de diseñar las etiquetas y hasta el packaging de cada producto -siempre de madera-.
"La diferencia entre el chocolate artesanal y el industrial es muy notable cuando uno los prueba. El chocolate-chocolate no es un producto muy elástico, más allá de lo que se suele comer", acotó desde su especializado punto de vista.
"Hacemos kits para acompañar una buena bebida: un tablero de ajedrez con sus piezas (todo de chocolate) y hasta una 'colección de libros' -la caja tiene esta presentación y en su interior hay distintos chocolates-. Incluso, hacemos una copa de chocolate especial para que se pueda tomar champagne en él", finalizó el matrimonio.
