Aunque todos relacionamos el pollo frito con la gastronomía estadounidense, su origen se remonta siglos atrás y tiene influencias de la cocina escocesa y africana. Lo cierto es que es una comida especiada, bien condimentada y tiene un sabor exquisito.
Para preparar la receta de pollo frito no necesitas muchos ingredientes ni grandes habilidades culinarias. La clave es marinar el pollo en una mezcla de leche y huevo y luego rebozarlo en una preparación de harina y especias. Por su parte, para una fritura correcta, se debe cocinar una porción a la vez, para no bajar la temperatura del aceite.