Un fuerte debate sobre libertad de cátedra, censura y posicionamientos políticos sacude a las universidades públicas luego de que un profesor eliminara material académico aportado por un integrante de su equipo, lo que derivó en un escándalo institucional e ideológico.
Una disputa por contenidos desató un debate por libertad de cátedra y censura en las universidades
Un profesor eliminó material académico sobre el índice de abuelidad en una cátedra de genética y desató una disputa que expuso tensiones ideológicas en la UNSL
El conflicto, surgido en Universidad Nacional de San Luis (UNSL) expuso una profunda fractura dentro del plantel docente y tuvo repercusiones no sólo en la Facultad de Química, Bioquímica y Farmacia sino en todo el ámbito universitario.
El origen del conflicto
La controversia se inició en la cátedra Biología molecular e ingeniería genética, donde el jefe de trabajos prácticos, Leonardo Seguín, subió material didáctico sobre el índice de abuelidad, una herramienta genética utilizada para determinar el vínculo entre abuelos y nietos. Este método, desarrollado en el país, es empleado desde hace décadas por Abuelas de Plaza de Mayo para identificar a niños apropiados durante la última dictadura militar.
Aunque el contenido forma parte de aplicaciones reales y reconocidas de la genética forense, su inclusión desató la polémica cuando el profesor responsable de la materia, Darío Ceferino Ramírez, decidió eliminar sin aviso previo el material cargado por Seguín. En su descargo, Ramírez sostuvo que la incorporación del índice de abuelidad constituía un acto de “adoctrinamiento político”.
La Universidad Nacional de San Luis (UNSL) en el foco por la libertad de cátedra.
La decisión generó malestar dentro del equipo de cátedra. Seguín afirmó que la medida fue inconsulta, contraria a lo acordado en reuniones previas y ejecutada de manera unilateral. Además, denunció que Ramírez prohibió a su ayudante subir contenidos sin autorización expresa, lo que interpretó como un intento de restringir la autonomía docente.
El rector de la UNSL, Raúl Gil, enfrenta así su primer conflicto institucional de peso, en un ámbito especialmente sensible: ambos docentes pertenecen a la facultad donde él desarrolló su carrera académica. Por ahora, la universidad no emitió un comunicado oficial ni definió qué pasos seguirá para mediar en la disputa.
El descargo del profesor y las críticas
En su presentación formal, Ramírez justificó su accionar alegando que se opone a cualquier forma de adoctrinamiento “sea cual fuere la ideología política, menos en el espacio áulico, en el cual el alumno considera al profesor como modelo y autoridad en la temática”.
La situación escaló cuando estudiantes y docentes difundieron capturas de redes sociales del propio Ramírez, en las que se mostraba admirador de Jorge Rafael Videla, dictador condenado por delitos de lesa humanidad. La revelación profundizó las sospechas sobre las motivaciones que llevaron a censurar el contenido.
Se viralizaron en la UNSL capturas del docente que quitó material sobre el índice de abuelidad.
La reacción dentro de la comunidad universitaria fue inmediata. Diversas agrupaciones estudiantiles y docentes repudiaron lo ocurrido, al considerarlo un caso grave de censura y una vulneración directa de la libertad de cátedra, uno de los pilares de la universidad pública argentina.
La Asociación de Docentes Universitarios (ADU) expresó su “más enérgico repudio y profunda preocupación”, al señalar que la conducta del profesor representa “una flagrante vulneración de la libertad de cátedra y un antecedente peligroso para el ejercicio docente en la institución”. Además, destacó que el índice de abuelidad es un contenido académico plenamente válido dentro de la genética aplicada y reconocido a nivel internacional.






