YPF anunció este lunes la firma de los acuerdos para la venta de dos bloques de áreas maduras ubicadas en Mendoza. Las empresas seleccionadas fueron Petróleos Sudamericanos y Petroquímicos Comodoro Rivadavia (PCR).
YPF anunció este lunes la firma de los acuerdos para la venta de dos bloques de áreas maduras ubicadas en Mendoza. Las empresas seleccionadas fueron Petróleos Sudamericanos y Petroquímicos Comodoro Rivadavia (PCR).
Resta la confirmación de la cesión del clúster Mendoza Sur, que es negociado por una UTE conformada por Quintana Energy y TSB.
Además, YPF anunció otros cuatro acuerdos para la venta de 13 áreas convencionales más agrupadas en 6 clústeres de Río Negro, Neuquén y Chubut.
Luego de finalizado el proceso de due dilligence, y en los plazos establecidos, YPF firmó seis acuerdos en total.
El clúster Mendoza Norte es el que fue cedido a la empresa Petróleos Sudamericanos y las dos áreas de Llancanelo fueron cedidas a la firma PCR.
También, se avanzó con la cesión a la operadora Velitec del área Señal Picada/Punta Barda ubicada en las provincias de Río Negro y Neuquén.
En la provincia de Chubut, la compañía PECOM continuará con el desarrollo de las áreas Escalante – El Trébol y Campamento Central - Cañadón Perdido. En tanto, se acordó con las operadoras Bentia Energy (del ex mnistro de Energía Javier Iguacel) e Ingeniería Sima, la cesión de las cuatro áreas que comprenden el clúster de Neuquén Norte.
Ahora será el turno de la evaluación de los gobiernos provinciales involucrados, que son los que deberán validar el proceso de cesión definitiva de las áreas.
Desde YPF confirmaron que las negociaciones por los otros bloques del proyecto Andes siguen en marcha.
Petróleo Sudamericanos SA, la empresa que obtuvo la cesión del clúster Norte, es presidida por Pablo Alberto Miedvietzky.
El bloque de 1.911 km2 comprende áreas en Barrancas, Río Tunuyán, Ceferino, Mesa Verde, La Ventana y Vizcacheras. Es una zona histórica y actualmente sus áreas son las que mayor producción arrojan -11,25 barriles diarios de petróleo y 99 km3/d de gas distribuidos- pero, el 98% del total de líquidos que se extraen son agua, lo que le baja el potencial.
Petróleos Sudamericanos es una compañía de energía dedicada a la exploración, explotación y operación de campos maduros. La empresa es dirigida por la familia Miedvietzky. Su presidente es Pablo y el vice Alejandro. También son referentes de Amarilla Gas, uno de los principales distribuidores de gas licuado de petróleo.
Esta firma actualmente opera solo en Río Negro áreas convencionales con potencial de crecimiento.
Petroquímica Comodoro Rivadavia S.A (PCR) es la firma que adquirió el clúster Llancanelo, ganándole la pulseada a Oilstone Energía SA., que asomaba como el favorito.
Ubicado en las cercanías a la ciudad de Malargüe, posee un crudo pesado de 12 grados API y hasta 10 mil centipoise de viscosidad con un rango de profundidad del orden de los 600 a los 1000 metros; lo que lo convierten en un bloque único pero desafiante.
El área produce 1.818 barriles por día y 2 km3 de gas. YPF tiene la concesión y ya presentó en 2019 un proyecto de inversión con pedido de reducción de regalías por lo costosa que resulta la operación de extracción. Ese compromiso con Mendoza está vigente por lo que, el inversor, que absorverá tanto los derechos como las obligaciones, deberá cumplir con aquel plan.
PCR es una firma centenaria controlada por las familias Brandi y Cavallo. Su presidente y CEO es Martín F. Brandi.
Comenzó en 1921 como empresa dedicada a la producción de hidrocarburos en Chubut, en el kilómetro 8 de Comodoro Rivadavia, siendo la segunda empresa más antigua de la industria petrolera, actividad que continúa desarrollando.
En la década de los 90 uno de sus principales yacimientos fue El Sosneado, en Malargüe.
Actualmente, PCR se especializa, además de en la producción de petróleo y gas natural, en la producción de cemento y en la generación de energía eléctrica a través de fuentes renovables. Tiene presencia también en Ecuador y Colombia.
Es un proceso de venta que inició en febrero con el objetivo de optimizar el portfolio de áreas del Upstream convencional para buscar la eficiencia del capital de inversión de YPF, permitiendo a la empresa continuar desarrollando las áreas no convencionales que aportan mayor rentabilidad por dólar invertido.
A lo largo del proceso, que llevó adelante el Banco Santander, se recibieron más de 60 ofertas de unas 30 compañías nacionales e internacionales lo que demuestra el interés de la propuesta.
Se denomina yacimientos maduros a aquellos que ya pasaron su pico óptimo de producción. Las buenas prácticas de la industria petrolera establecen que para las compañías grandes como YPF no es eficiente ni rentable seguir produciendo en este tipo de áreas. Por ende, esos yacimientos deben ser operados por PyMES u operadoras más pequeñas que puedan darle continuidad a la actividad.