Y ésta es una de las grandes diferencias que históricamente se mantuvo entre Cornejo y Morales. El mendocino se ha mostrado, dentro de Juntos por el Cambio, muy crítico a la gestión de Mauricio Macri, a diferencia del jujeño que se estuvo más en línea con las directrices de Marcos Peña.
Este guiño de las últimas horas de Cornejo a Lousteau llega después de otro gesto en consonancia. Las diputadas cornejistas Jimena Latorre y Pamela Verasay votaron en contra de la designación de Mario Negri, propiciada por Morales, como presidente del bloque de la UCR y hasta firmaron el comunicado del nuevo UCR-Evolución aunque sin sumarse al mismo.
En ese escrito, el sector que tiene a Lousteau a la cabeza y que formó su propia bancada de 12 diputados explicaba oficialmente que considera necesaria una renovación y ser fiel a lo que los ciudadanos votaron en las últimas elecciones, en las que Negri perdió en las PASO de Juntos por el Cambio.
En el Senado, el radicalismo firmó la paz
Esas diferencias que acabaron con el bloque partido en dos y los referentes enfrentados a vivas voces no se repitieron a la hora de diagramar la conformación del radicalismo en la Cámara Alta, donde Juntos por el Cambio necesita de la unión para hacerle frente a Cristina Fernández de Kirchner, presidenta del Senado.
Tras decenas de reuniones, el mendocino logró el acuerdo de unidad entre los legisladores que responden a Morales y los que responden a Lousteau. Luis Naidenoff seguiría al frente del bloque radical en el Senado, Martín Lousteau se quedaría con la vicepresidencia segunda de la cámara y Cornejo ocupará el sillón de presidente del interbloque, cargo al que llega tras convenir con el PRO.
El jefe del interbloque es el que tiene la última palabra en los debates aunque esto poco y nada le importa al mendocino que ya ha dicho más de una vez que seguirá sin hablar en el parlamento porque "no le gusta". Lo que sí le dará a Cornejo este puesto es la posibilidad de seguir prendido en la primera plana de la política: dejará de ser el presidente nacional de la UCR pero no pasará a ser un "senador más" sino que podrá sentarse en la mesa chica de JxC con un cargo que lo respalde como autoridad.
La pulseada que perdió Cornejo
La batalla interna que sí perdió Alfredo Cornejo fue la de la fecha de las elecciones de la Unión Cívica Radical. La intención del hasta ahora presidente era patear la renovación de autoridades hasta febrero o marzo del 2022. "Con la postergación de las elecciones legislativas todo el calendario se reformuló y no tiene sentido hacer la elección de la UCR ahora en diciembre", decían desde el entorno del exgobernador de Mendoza.
Sin embargo, con un comunicado oficial y ya después de que Cornejo abrochara la presidencia del interbloque, la UCR confirmó que las elecciones se harán el 17 de diciembre como estaba previsto de antemano.
https://twitter.com/UCRNacional/status/1468008522658947075
Y aquí es donde vuelven a enfrentarse Morales y Lousteau. La pelea entre ambos ya es de larga data y en el fondo trae encubierta su lucha por ser presidentes del radicalismo.
"La mesa de conducción del Comité Nacional de la UCR convocó para el próximo viernes 17 de diciembre al Plenario Constitutivo del partido para la elección de sus autoridades período 2021-2023", confirmó el radicalismo este lunes por la noche en una foto con Cornejo a la cabeza y sin Lousteau entre los presentes.
Y es que, después de tantos dimes y diretes, el que tiene el mayor respaldo para quedarse con el sillón que deja el mendocino es justamente su "rival" Gerardo Morales, quien se encamina para ser el nuevo presidente.