El fiscal de Robo y Hurtos Galdo Andreoni ordenó la detención del Auxiliar Palleres luego de tomarle declaración, la cual no fue contundente, tuvo contradicciones y varias inconsistencias.

Además, varios empleados del Correo Argentino ataron cabos y en el momento de declarar indicaron que en los últimos días, el efectivo había preguntado sobre la recaudación y ciertos movimientos puntuales del dinero que se manejaba allí.

Correo Argentino, Familia Macri.jpg
El atraco fue en la sucursal del Correo Argentino de calle Alberdi y España, de Fray Luis Beltrán, en Maipú.

El atraco fue en la sucursal del Correo Argentino de calle Alberdi y España, de Fray Luis Beltrán, en Maipú.

Además, la Inspección General de Seguridad pidió el pase a pasiva del policía, mientras también realiza una investigación administrativa, la cual va en paralelo a la penal.

Creen que el fiscal Andreoni podría imputar a Palleres por robo agravado y permanecería detenido.

Mientras, siguen los pasos de los tres asaltantes que ingresaron a la sucursal de calle Alberdi y España, de Beltrán, y no descartan que haya otros policías implicados, ya que según lo relatado por el único empleado del correo que estaba a las 7.30 del martes cuando el hecho, su forma de actuar no era la de un delincuente cualquiera.

Además, hubo un dato que despertó la atención del investigador, ya que según el relato de la víctima, los asaltantes habrían dicho que eran de la Oficina de Auditoría de Servicios Extraordinarios del Ministerio de Seguridad, un dato que le pareció muy preciso.

El hecho

El auxiliar Fernando Pallares, quien trabajaba en la Comisaría 49 de Rodeo del Medio, Maipú, cumplía con el servicio extraordinario, es decir horas extras pagas, en el Correo Argentino de Beltrán, como lo hacía todos los días, pero algo fue diferente el martes a las 7.30.

Tres hombres llegaron cuando aún no estaba abierta la sucursal para el público, y había solo un empleado en el interior. Según lo que se supo en un primer momento, los tres hombres que estaban vestidos de civil, indicaron que eran policías que también iban trabajar.

Sin dudarlo, Pallares les abrió la puerta, e inmediatamente los sospechosos esgrimieron armas de fuego, le sacaron la pistola reglamentaria al efectivo y apuntaron contra el empleado a quien le exigieron todo el dinero que había en el local.

En segundos, los asaltantes escaparon a pie con un botín de $5.500.000, y no fueron detenidos.

Temas relacionados: