Los tres malvivienes utilizaron chalecos antibalas, cachiporras, armas de fuego y borceguíes para perpetrar el ataque. Se desquitaron con la dueña de un almacén, dos clientes.

Un banda de jóvenes delincuentes golpeó salvajemene a sus víctimas en un asalto en el Sur

Por UNO

Un brutal asalto sufrió una comerciante de San Rafael y dos clientes cuando tres jóvenesdelincuentes los golpearon durante un asalto en el que utilizando armas, cachiporras, chalecos

antibalas y borceguíes de la policía.

El hecho ocurrió en calle Las Marimoñas 1.130, donde Adriana Cortéz tiene su negocio.

Fue el viernes cerca de las 21.15, según trascendió hoy: "Estaba atendiendo a una nena de 11

años que compraba una gaseosa. Cuando sale, vienen tres chicos jovencitos y los dejo pasar porque

uno me ganó la puerta. Cuando doy media vuelta me pega la primera trompada en el hombro y el

culatazo con el arma", relató la víctima.

Dijo que estaban con el rostro semicubierto con bufandas y cuellos polares. La agarraron a

patadas en el piso, la golpeaban con armas y también la tiraban del pelo llevándola hacia el fondo

del negocio.

"¿Dónde está la plata, dónde está la plata? me gritaban fuertemente los delincuentes. No me

resistí en ningún momento a entregarles el dinero", contó Adriana a

Diario de San Rafael.

La mujer explicó que sólo tenía 200 pesos pero que los sujetos le pedían más. Cortaron uno

cable con el que le ataron los pies y con la cuerda de una bata le ataron las manos.

Los delincuentes quisieron cerrar la puerta con llave, pero rompieron la cerradura, por lo

que sólo cerraron las cortinas. A los pocos minutos un cliente ingresó al local y vio cómo robaban

fiambre, bebidas alcohólicas y otras mercaderías.

Atrás de él entró una mujer que se encontró con el mismo panorama y ambos fueron golpeados.

"Al cliente le rajó la cabeza de un palazo y el otro también comenzó a golpearlo con la culata del

revolver", recordó Adriana.

A pesar del episodio vivido, lo que más le llamó la atención es que los delincuentes contaban

con elementos de la policía como chalecos antibalas, cachiporras, borceguíes.

Poco después los efectivos encontraron un Peugeot 405 abandonado en el barrio El Molino, por

donde habrían escapado los delincuentes. En el vehículo había un chaleco de la policía, una

cachiporra, una gorra de Policía, una boina de Infante y un arma de fuego.

Según fuentes policiales estas cosas fueron sustraídas de la sede de Amuppol, donde está todo

el equipamiento para los efectivos, que en lo que va del año sufrió dos robos.

Las actuaciones quedaron en la Comisaría 38, de San Rafael.