Los altos jefes de la Unidad Motorizada de Acción Rápida (UMAR) fueron sumariados este martes por
la Inspección General de Seguridad (IGS). El jefe y el subjefe están acusados de pedirles un
"diezmo" a sus subordinados. Además, serían suspendidos por un mes.
La resolución del Directorio de la IGS habla de "instruir sumario administrativo a estos
funcionarios policiales por los hechos denunciados", además de "solicitar al Ministerio de
Seguridad resuelva el pase a Revista Pasiva (suspensión preventiva) por el término de teinta días".
A mediados de enero pasado, un grupo anónimo de policías de esa división denunció ante la IGS
que los jefes, ahora sumariados, exigían el pago de un "diezmo" de 150 pesos por mes.
Los uniformados son 90 en total, por lo que el monto del dinero recaudado mensualmente era de
importancia.
Los jefes de la UMAR pedían ese dinero para los cupos de recargo y para solventar gastos de
mantenimiento que demanda el funcionamiento de la unidad.