Londres se estremeció con un acto de violencia brutal que derivó en un crimen que dejó a todos en estado de shock
Marcus Monzo, el criminal detenido en Londres
Marcus Monzo, un hombre de 36 años con doble nacionalidad española y brasileña, fue acusado de cometer el asesinato de Daniel Anjorin, un adolescente de 14 años, en un ataque con una espada samurái ocurrido en Londres.
Este crimen, descrito como una "odisea sangrienta" de 22 minutos, no solo se cobró la vida de un joven prometedor, sino que también dejó a cuatro personas heridas, incluyendo dos policías de Londres que enfrentaron al atacante con valentía.
Lo que hizo este crimen aún más inquietante fue el video publicado por Marcus Monzo en redes sociales, donde, semanas antes, se le veía desempaquetando con entusiasmo una espada samurái, calificándola de “jodidamente sexy”.
Marcus Monzo, residente del este de Londres, se presentaba en redes sociales como un músico aficionado y autoproclamado “místico”.
El 4 de abril de 2024, Marcus Monzo compartió un video en el que desempaquetaba la espada samurái que usaría en el posterior crimen, mostrando una fascinación que, en retrospectiva, resultó perturbadora.
El ataque comenzó poco antes de las 7 del 30 de abril de 2024, cuando estrelló una camioneta contra una casa. Golpeó a un hombre de 33 años con el vehículo y lo apuñaló en el cuello.
Luego, irrumpió en una casa cercana, donde atacó con su espada samurai a un hombre de 35 años, causándole heridas en el brazo mientras gritaba frases como “Si no creen en Dios, les haré daño”.
A continuación, persiguió a Daniel Anjorin, quien caminaba hacia la escuela con auriculares puestos, sin percatarse del peligro. La víctima del crimen fue atacada por la espalda, recibiendo heridas mortales en el cuello y el pecho que lo decapitaron.
Cuando la policía de Lodnres llegó, Marcus Monzo emergió de unos arbustos y atacó a dos agentes. Una oficial sufrió heridas graves, casi perdiendo una mano, mientras que otro resultó con lesiones significativas en brazos y manos.
A pesar de los intentos por neutralizarlo con spray incapacitante y una pistola Taser, Marcus Monzo continuó su rampage hasta que fue finalmente sometido con descargas eléctricas y arrestado.
Marcus Monzo fue acusado de siete crímenes: asesinato, dos intentos de asesinato, dos cargos de lesiones corporales graves, robo agravado y posesión de un objeto punzante.
En el juicio, iniciado en junio de 2025, se presentaron pruebas como el video del desempaquetado de la espada y las grabaciones de las cámaras policiales, destacando la brutalidad del crimen.