Paloma León está acusada de cobrarles a sus congéneres para dejarlas ofrecer servicios en la zona roja.

Juzgan a una travesti por explotación de prostitutas

Por UNO

Por Ariel Cubells - [email protected]  Una travesti que en 2013 se hizo conocida por ser acusada como la líder de una mafia que manejaba y explotaba a personas de su misma condición comenzó a ser juzgada ayer a raíz de golpizas, un robo y de amenazas para controlar una zona de la Cuarta Sección, en Ciudad. 

Paloma León (43), como se hacía llamar  –su verdadero nombre es Daniel Ariel Araya Segura–, se presentó ayer en la Primera Cámara del Crimen para enfrentar las imputaciones que la Justicia le endilgó: robo agravado en poblado y en banda y extorsión y explotación de prostitución en grado de tentativa. Según reconstruyó la investigación, la sospechosa exigía entre 1.500 y 2.000 pesos para que las travestis pudieran trabajar en la denominada “zona roja” de la Cuarta. Años antes fue condenada por un homicidio. 

Una denuncia en noviembre de  2013 fue el inicio de la investigación que ahora derivó en el debate. La travesti Pamela Morales sufrió un salvaje ataque en la madrugada del sábado 2 de noviembre de aquel año, cuando fue apuñalada en su abdomen, rociada con querosén y prendida fuego, aparentemente por haber osado ejercer la prostitución en la esquina de Entre Ríos e Ituzaingó de Ciudad sin pagarle a Paloma León el derecho de tener un lugar allí. La víctima terminó con el 20% del cuerpo quemado en terapia del hospital Lagomaggiore. 

Meses antes, en las inmediaciones del Acuario, Pamela y su prima Anahí también habían sido golpeadas y atacadas mientras trabajaban, aparentemente por un grupo de travestis que encabezaban la acusada y su marido. En ese hecho a la primera le robaron varios elementos personales, entre ellos el teléfono. 

Pero estos no serían los primeros ataques que habían denunciado las trabajadoras sexuales. Ya desde el 2012 se sucedían en la zona de la Cuarta Sección esas palizas a quienes se negaban a pagar por “la plaza” para prostituirse o que desobedecieran los mandatos de Paloma. Al menos dos denuncias se acumularon contra ellas: una del 18 de marzo del 2013, cuando fue desfigurada una travesti llamada Mariana, y otra del 22 de octubre, cuando Camila fue atacada a cadenazos en la espalda. La sindicada como líder fue detenida y quedó alojada en Contraventores, pero ese arresto no habría detenido el funcionamiento de su “megaempresa”.

Pese a que estaba tras las rejas, sus “hijitas”, como denominaba a las travestis que aglutinaba y que respondían a sus órdenes, hacían cumplir a rajatabla la defensa del territorio de oferta sexual.

La escalada de violencia precipitó una serie de allanamientos que lideró el fiscal de Ciudad Gustavo Pirrello en San Martín y Guaymallén. En el departamento del Este, los policías irrumpieron en una casa de la calle Cereceto, en Chapanay, en donde tenían el dato de que se les hacían las “operaciones” a las travestis. Según la investigación, Paloma financiaba los costos de esas intervenciones –la mayoría con aceite de avión– y luego se las cobraba a sus pupilas con altísimos intereses. La misma Pamela Morales contó en su perfil de Facebook que si el costo de la intervención rondaba los $1.000, cada travesti debía pagar $3.000. 

Sin embargo, en esa casa no se detuvo a nadie pero sí se logró arrestar a siete travestis en una vivienda de la calle Gobernador Videla al 600, en Guaymallén. De acuerdo con la pesquisa, en las tres habitaciones de ese inmueble era donde se prostituían varias jóvenes que manejaba Paloma. 

Una de las siete detenidas fue imputada de homicidio agravado –por el número de personas– en grado de tentativa, por el salvaje ataque a Pamela Morales cuando la quemaron. Para ese entonces y por las otras golpizas León ya estaba detenida, aunque se presume que desde su celda orquestó todo. Sin embargo, de esta causa fue desligada y hoy es juzgada por el resto de los hechos y la presunta extorsión y explotación de las travestis de la zona. 

En la primera jornada del debate se presentaron alrededor de 40 travestis que declararán durante el proceso, entre ellas Pamela y su prima Anahí, que ayer prestaron testimonio ante la Jueza Lilia Vila.