Las primeras pruebas del expediente complicaron a Leandro Llaver (32), el empleado judicial acusado de cometer un abuso sexual en San Martín a una menor de 12 años. El funcionario fue enviado al penal en la jornada de este jueves.
Las primeras pruebas del expediente complicaron a Leandro Llaver (32), el empleado judicial acusado de cometer un abuso sexual en San Martín a una menor de 12 años. El funcionario fue enviado al penal en la jornada de este jueves.
Fuentes vinculadas al caso detallaron que cerca del mediodía del fiscal Germán Hnatow decidió trasladar al funcionario judicial a la penitenciaría. Leandro Llaver estaba alojado en los calabozos de la Comisaría 12 desde la jornada de sábado, cuando fue detenido, y se especulaba con que pudiera recibir una prisión domiciliaria ya que padece una enfermedad por la cual incluso estaba haciendo su trabajo de digitalización de expedientes en forma remota desde antes de la cuarentena.
Sin embargo, debido a las primeras pruebas que lo comprometieron en la causa, el investigador del abuso sexual en San Martín decidió su alojamiento en el penal. De todas formas, la defensa del acusado puede pedir un control jurisdiccional para que un juez revea la situación.
Desde que se radicó la denuncia el sábado pasado se sabía que Leandro Llaver había sido identificado gracias a las conversaciones que se encontraron en el teléfono celular de la menor de 12 años, a quien habría conocido mediante las redes sociales y habría abusado en un departamento entre la noche del viernes y la madrugada del sábado. En los últimos días también se recepcionó la declaración de la víctima en una cámara Gesell, donde palabras más palabras menos ratificó la primera reconstrucción del hecho, según detallaron fuentes judiciales.
Por otro lado trascendió que un adelanto del informe que realizó el Cuerpo Médico Forense (CMF) habría encontrado lesiones que pueden corresponder a una violación, lo cual también comprometió a Leandro Llaver. El sospechoso está imputado por abuso sexual con acceso carnal y arriesga una pena de 6 a 15 años de cárcel.