La fiscal explicó que el hecho fue “muy grave” porque además del abuso, los acusados “son dos personas, uno que había sido policía y otro que lo era al momento de ocurrido el hecho”.
“Con el plus que la víctima, si bien era una persona mayor, tenía una discapacidad, un retraso moderado, y que tuvo muchas consecuencias a raíz del hecho”, añadió la funcionaria judicial.
Según se determinó en la investigación, ambos policías conocían a la víctima, ya que prestaban un servicio de seguridad informal en un comercio de barrio San Lorenzo al que aquel concurría.
Voceros del caso indicaron que en enero de 2019 los dos acusados invitaron a cenar a la víctima, que entonces tenía 38 años, a una casa de barrio San Lorenzo, en el oeste de la capital santafesina.
De acuerdo con la pesquisa, que se inició por la denuncia policial de una amiga de la víctima, los dos policías abusaron sexualmente del hombre y posteriormente lo amenazaron y agredieron con golpes en la cara y patadas.
De la investigación trascendió que el hombre, que padece un retraso mental moderado, “también fue filmado por los acusados durante el ataque sexual”.