Así lo estableció en un fallo la titular del Séptimo Juzgado Civil Rosana Moretti, quienademás indicó que dicha suma debe ser abonada en un plazo de diez días de haber sido dictada lasentencia. Los demandantes señalaron que uno de los jóvenes alquiló a la mujer (el 1 de febrero del2002) un departamento ubicado en la planta baja del edificio sito en la calle Lamadrid 325 de laQuinta Sección, en Ciudad. El 20 de junio del mismo año fue visitado por dos amigos quienes se recostaron en horas de lasiesta mientras que él, en cambio, decidió ir a tomar una ducha. En la demanda se indica que existían graves desperfectos en el calefón instalado en lapropiedad lo que unido a que el departamento carecía de la infraestructura necesaria para lograruna correcta evacuación de gases, produjo que el monóxido ocasionara la muerte de los ocupantes dela propiedad tal como surge de las necropsias realizadas en su momento en el Cuerpo Médico Forense. Ello -siempre según la demanda- fue ocasionado porque la propietaria dio en alquiler uninmueble que no cumplía con los requisitos mínimos exigidos por el Código de Edificación, a saber:los metros cubiertos mínimos, rejillas de ventilación y salidas de la chimenea del calefón. Imputa responsabilidad a la demandada tanto por su incumplimiento del contrato como por laresponsabilidad que le cabe como propietaria o guardiana del departamento en cuestión.
Una de las víctimas era alumno de la UTN, siendo decano Julio Cobos Uno de los jóvenes que perdió la vida tenía apenas 20 años y era oriundo de San Rafael aligual que otro de los muertos, con quien se conocían desde que eran niños. La tercera víctima erade nacionalidad chilena y los tres trabajaban en una confitería ubicada en la peatonal Sarmientoentre San Martín y 9 de Julio, de Ciudad. El primer muchacho había decidido estudiar ingeniería electrónica y cursaba el primer año dela Universidad Tecnológica Nacional que en ese entonces tenía como decano al actual vicepresidentede la Nación, Julio Cobos. Apenas el decano tomó conocimiento del trágico suceso concurrió en forma personal hasta lacalle Lamadrid para interiorizarse sobre los pormenores que rodearon el caso que provocó una granconmoción entre familiares de los jóvenes, alumnos de la Universidad y los vecinos que habían vistoa los estudiante apenas unas horas antes de su deceso. Por gestiones del decano de la UTN Julio Cobos y de la policía se avisó a sus padres queresiden en San Rafael sobre lo ocurrido.