El ídolo de Boca Juan Román Riquelme reconoció este viernes el mal momento futbolístico del equipo, pero remarcó que en caso de superar a Cruzeiro de Brasil y llegar a las semifinales de la Copa Libertadores, volverá a ser "favorito" al título.
Riquelme, a diferencia de otras oportunidades, no castigó al equipo dirigido por Guillermo Barros Schelotto, que sufrió una de sus semanas más duras con la derrota en el Superclásico ante River y la eliminación de la Copa Argentina frente a Gimnasia de La Plata.
"Para nosotros es doloroso perder el clásico. Sabemos que es un juego, pero cuando te ganan uno se enoja, mi hijo Agustín no le gusta perder nunca contra River. El partido de ayer (por el jueves) hace que todo parezca peor, o que la cosa esté muy complicada. Boca no está jugando bien, pero hay que felicitar a Gimnasia que ha hecho un buen partido", opinó.