Análisis y opinión

El empleo para toda la vida no existe más

Una buena parte del mainstream económico confunde empleo con trabajo y mira las estadísticas laborales con “chip” viejo y equivocado

El gran Robert Kiyosaki nos enseñó y mostró a principios de los años 2000, que el empleo para toda la vida y con buen salario se había terminado para siempre. En sus dos primeros libros, Padre Rico, Padre Pobre y sobre todo en el segundo El Cuadrante del Flujo del Dinero (para mí el mejor de todos los libros que ha escrito), pone en evidencia que la forma de ver lo laboral, el empleo, el trabajo, hasta ese momento, era ya una entelequia. Ayudó a reafirmar con ejemplos, incluso propios, aquella distinción que hacían los economistas de la escuela austríaca entre empleo y trabajo. Hoy todo esto es mucho más evidente aún.

Diferencia entre empleo y trabajo

La idea de una “economía generando trabajo”, viene de la teoría de la explotación de Marx quien señalaba que el valor de los bienes y servicios, deriva del trabajo “invertido” en su realización. Para llegar a esta errada conclusión, Marx se valió de la teoría del valor-trabajo de David Ricardo, la cual tergiversa para poder concluir que todo el valor es generado por el trabajador, y que el capitalista se queda con una “plusvalía” que le pertenece. Nunca Ricardo dijo semejante cosa. De aquí surge que el trabajo lo es todo, el esfuerzo que conlleva poder llevarlo a cabo es lo que le da valor al bien o servicio final.

La mayor parte de las escuelas económicas sucumbieron a tamaño error, proponiendo la “generación de trabajo” a partir de la implementación de políticas económicas específicas para tal efecto. Si el valor de los bienes y servicios dependen del esfuerzo de trabajo realizado, lo que tengo que hacer, como “policy maker”, es poner en marcha políticas económicas que generen ese tipo de esfuerzo, por supuesto, sin importar si producen o no valor.

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Obra de asfaltado en El Carrizal, que generó varios puesto de trabajo para su realización.

Obra de asfaltado en El Carrizal, que generó varios puesto de trabajo para su realización.

Una anécdota de Milton Friedman servirá para mostrar el absurdo de dicha idea (sería impropio siquiera llamarlo teoría). Cuenta que visitando la India, lo llevan a mostrarle los trabajos que estaban realizando para construir rutas (obra pública, algo que los políticos adoran hacer). En la muestra, le señalaban la cantidad de “mano de obra” que eso generaba, mientras veía que para dichas rutas, el personal abocado a ello usaba palas. Friedman preguntó por qué no se usaban máquinas para que se terminaran más rápido. La respuesta del primer ministro del momento fue “porque destruiremos muchos puestos de trabajo”. Friedman lo miró y les dijo: “Entonces en lugar de palas, denles cucharas”.

La escuela austríaca diferencia entre empleo y trabajo. El primero genera valor, el segundo no. Los gobiernos sólo pueden generar el segundo con sus políticas económicas (gasto público, obra pública, políticas micro sectoriales, emisión monetaria para generar demanda y empleo, endeudamiento, etcétera). Toda política económica distorsiona las señales del mercado generando que las decisiones de los agentes económicos, sean consumidores, empresarios, financistas, etcétera, vayan por un camino totalmente diferente al que hubieran tomado sin dichas políticas. Es decir, destruyen valor (recordemos que el valor es subjetivo); ergo, todo “trabajo” generado por esa vía, destruye valor, aunque haya esfuerzo en su realización. Siguiendo la anécdota de Friedman, incluso usando máquinas esos trabajos no generan valor.

La palabra trabajo proviene del latín “trepaliare” que era una expresión popular que significaba la “acción de torturar” con un tripalium. Hasta el origen de la palabra evidencia la no generación de valor alguno.

La economía argentina está generando empleos, no trabajos

A diferencia de la palabra trabajo, emplear proviene del francés antiguo “empleiier” (hoy sería employer) y este a su vez del latín “implicare” que significa entrelazar, plegar, enredar, e indirectamente significa comprometer, implicar; es decir, crear. La economía sólo puede generar empleos, nunca trabajos y los gobiernos a la inversa. En una economía capitalista de libre mercado, se generan empleos y dado el valor subjetivo, no existe tal cosa como “explotación”, ya que los salarios reflejan simplemente la contribución que realiza el empleado al valor del bien o servicio final (insisto. recordemos que el valor es subjetivo).

ALFREDO CORNEJO OBRAS RUTA 33
La economía sólo puede generar empleos, nunca trabajos; y los gobiernos a la inversa. En la foto, Alfredo Cornejo en la Ruta 33.

La economía sólo puede generar empleos, nunca trabajos; y los gobiernos a la inversa. En la foto, Alfredo Cornejo en la Ruta 33.

Los últimos datos de empleo publicados por el INDEC, muestran precisamente esto. Por primera vez en mucho tiempo aumentaron los empleos privados formales, junto con los empleos informales y los empleos independientes, mientras que los trabajos públicos cayeron, comparando el tercer trimestre del 2025 contra el mismo trimestre del 2024. Pero con un dato adicional clave. No hay políticas económicas específicas para que suceda. Por eso toda comparación con otros años (como puede ser comparar con el 2023, 2022, etcétera) no tiene ningún sentido y es inválida científicamente, debido a que en esos momentos (y en buena parte de la historia económica argentina reciente), siempre existieron políticas económicas para intentar crear trabajo, algo que no se puede comparar con empleos.

Es verdad que ha seguido aumentando el empleo informal (y dicho sea de paso, es el que ha tenido una evolución muy fuerte en su remuneración en estos 2 años), pero este es el resultado de que sigue existiendo demanda de empleo informal, debido a que el formal es muy caro para empresarios, y costoso también para los empleados que prefieren estar en negro para no pagar impuestos al trabajo.

Cada vez que una empresa toma un empleado, en términos de costo laboral total, significa que toma 1,7, es decir, cada 2 que toma se paga por 4, dado los costos que deben afrontar los empresarios y los trabajadores sobre el costo laboral total (alrededor de 0,45 paga el empresario y 0,25 paga el empleado sobre un salario formal que sería 1).

El desempleo va lentamente bajando pero con una estructura totalmente diferente a la de otros momentos en Argentina. Los gobiernos anteriores, camuflaban el desempleo aumentando los puestos de trabajo en el Estado (nacional, provincial y municipal). Los datos son elocuentes. Desde 2002 hasta 2023 el empleo privado formal prácticamente no se ha movido, mientras que los puestos de trabajo en el Estado han subido en cifras de dos dígitos en todos los niveles. También aumentó el empleo informal llegando a 55% del total de empleos.

empleo, empresa
Cada vez que una empresa toma un empleado, en términos de costo laboral total, significa que toma 1,7, es decir, cada 2 que toma se paga por 4.

Cada vez que una empresa toma un empleado, en términos de costo laboral total, significa que toma 1,7, es decir, cada 2 que toma se paga por 4.

La reforma laboral es imprescindible

Sólo existen 3 derechos: vida, libertad y propiedad. Cualquier cosa que los viole no se puede llamar derecho. La única forma de aumentar la formalidad del empleo y hacer que el desempleo estructural sea cero (siempre existirá desempleo friccional, debido a los cambios y a la dinámica que tiene la economía y el mercado), es liberar el mercado laboral (en lo personal eliminaría incluso el fuero laboral, algo que como tal existe sólo en Latinoamérica). Esto haría que el costo laboral disminuyera casi a cero, quedando sólo el salario. Y con un mercado laboral flexible, nadie quedaría desempleado.

La forma en que los salarios reales suben, es con mayor tasa de capitalización, es decir, con mayor inversión por empleado. Los empleados de USA tienen salarios 100 veces más altos que los mismos empleados de Calcuta, no porque en USA hayan sindicatos con muchos paros, o los empresarios sean más “empáticos” que los de Calcuta. Simplemente la tasa de capitalización en USA es 100 veces más alta.

Para que la inversión suba, y por ende los salarios, dentro de una economía sin desempleo por tener un mercado libre, es necesario que quien venga a invertir a Argentina (y dentro de ella a una provincia/municipio), tenga la seguridad que mañana seguirá siendo dueño de lo que invirtió hoy. Es por eso que la reforma laboral es crucial, aún sin ser el ideal.

Abogar por protección, es abogar por mayor desempleo. El mundo está cambiando a pasos agigantados. Entre la IA, la Blockchain y la Robótica, se devorarán todos los trabajos y algunos empleos que antes generaban algo de valor. El verdadero empleo en el siglo XXI será aquel que tenga creatividad e innovación, algo connatural al ser humano. Argentina tiene que ir por más tecnología y más máquinas y no por más cucharas.

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