Becky Szenck y Mark Higgins decidió mudarse a su nueva casa, cuando tuvieron todo su equipaje hecho, subieron una imagen a Facebook en la que se los veía junto a su bebé en la casa que dejaban ese mismo día. La imagen iba acompañada de un texto en el que explicaban que estaban ansiosos por hacer la mudanza de sus muebles y de sus objetos personales a su nuevo hogar. Algo aparentemente inofensivo y que no tendría por qué haberles causado ninguna dificultad.
Sin embargo, unos ladrones decidieron aprovechar la situación y, tras ver el posteo en la red social, alquilaron un camión y se llegaron a la vivienda para, supuestamente, hacerse cargo de la mudanza. A la mujer le parecieron muy profesionales y, de hecho, se mostró encantada de que llenaran el vehículo con tanta rapidez y eficiencia. Cargaron todo, desde la heladera, hasta la ropa y la cuna del bebé.
Todo parecía marchar sobre rieles hasta que, tras esperar durante horas en su nueva casa al camión y llamar a la empresa, se dieron cuenta de que habían sido estafados y robados. Y todo, por culpa de Facebook. Así pues, perdieron más de 12 mil euros en objetos, no solo electrodomésticos o ropa, sino también objetos personales e irremplazables. Lo único que no pudieron robar fue el televisor, porque la trasladaron ellos en su auto.