Los carabineros italianos encontraron este miércoles, al cabo de una búsqueda rocambolesca un cuadro de Gauguin y otro de Bonnard robados en 1970 en Londres, y valorados en millones de euros.
Los carabineros italianos encontraron este miércoles, al cabo de una búsqueda rocambolesca un cuadro de Gauguin y otro de Bonnard robados en 1970 en Londres, y valorados en millones de euros.
"La historia de estos cuadros es digna de un filme, rocambolesca", comentó Franceschini.
"Olvidados en un tren que viajaba entre París y Turín", fueron hallados por el personal de la empresa de ferrocarriles italiana, que no se dio cuenta de su valor, contó el general Mossa. Las obras fueron registradas como objetos encontrados y subastados en 1975 en Turín, norte de Italia. Un obrero de la Fiat, "apasionado de arte", los compró durante la subasta por un valor irrisorio, 45.000 liras italianas de entonces, unos 23 euros, y "los colgó en la cocina de su casa" como decoración, contó el general. Tras jubilarse, el obrero se trasladó a Sicilia, donde las obras permanecieron 40 años antes de ser recuperadas por los carabineros. La historia de cómo los carabineros llegaron hasta la cocina siciliana también es "extraodinaria" y algo misteriosa. A través de fotografías enviadas a los carabineros, los expertos llegaron a la conclusión de que se trataba de pinturas de dos grandes maestros franceses. Gracias al mayor banco en el mundo de datos de obras de arte robadas, creado hace 45 años por el cuerpo de carabineros italianos, con 5,7 millones de objetos registrados, se llegó a establecer quiénes eran los autores de esas pinturas. Los cuadros, que no figuraban como obras robadas, fueron descubiertos cruzando catálogos oficiales de distintos años, ya que aparecían oficialmente en los del año 1964 y habían desaparecido en los del año 2001. Dos artículos de junio de 1970 en el New York Times y en un diario de Singapur en los se mencionaba el robo ocurrido en Londres, levantó las sospechas de los carabineros. Se prevé una larga batalla judicial para establecer quiénes son los legítimos propietarios de las obras, ya que el obrero siciliano las adquirió de forma legal. El recorrido de las obras, desde el momento en que fueron robadas hasta su abandono en el tren italiano aún no ha sido reconstruido, explicaron los carabineros."El comercio ilegal de arte es uno de los negocios más lucrativos en el mundo después del de armas, droga y productos financieros", recordó el general Mossa. Fuente: Noticias Argentinas