La promesa se produce luego de que el Vaticano expulsó al religioso Abel Pérez, quien confesó haber abusado sexualmente de 14 menores en dos colegios chilenos

En Chile, Maristas prometen llevar a la Justicia a sus miembros pedófilos

Por UNO

Santiago. La congregación marista, una hermandad católica con religiosos no ordenados, se comprometió a llevar ante la Justicia a todos sus miembros que hayan cometido abusos sexuales contra menores en los colegios que administran en Chile.

El vicario general de los maristas, Luis Carlos Gutiérrez, encabezó junto con otras altas autoridades de la congregación un encuentro en Santiago con víctimas de abusos sexuales cometidos por religiosos, en medio de varios escándalos de pederastia que golpean a la Iglesia Católica chilena.

"Nos hemos comprometido a llevar ante la Justicia a quienes hayan perpetrado estos abusos en contra de los niños, niñas y adolescentes que tenemos a cargo en nuestros colegios", dijo Gutiérrez en un comunicado.

La promesa se produce luego de que el jueves el Vaticano decretó la expulsión del religioso marista Abel Pérez, quien confesó haber abusado sexualmente de 14 menores en dos de los colegios de la congregación en Chile desde la década de los setenta.

"Le hemos informado y entregado este decreto al afectado, y se han iniciado los trámites para hacerlo efectivo", indicó la congregación en otro comunicado.

Pérez, de origen español, admitió los abusos en 2010, pero los maristas decidieron denunciar los hechos a las autoridades recién siete años después, luego de que dos de las víctimas revelaran los ataques. El religioso se encontraría actualmente en Perú.

"Los hermanos y laicos responsables de la misión cooperarán plenamente con todas las investigaciones sobre estos asuntos", afirmó Gutiérrez.

El Vaticano investiga el supuesto encubrimiento de los abusos sexuales cometidos por el influyente cura chileno y formador de obispos Fernando Karadima, hecho que involucra al menos al obispo de la ciudad de Osorno, Juan Barros, quien fue uno de sus discípulos.

Karadima fue vetado de sus funciones de por vida por el Vaticano en el 2011.

Francisco se reunió con víctimas de Karadima y convocó al Vaticano a los más de 30 obispos de la iglesia chilena, quienes decidieron presentar su renuncia en medio del escándalo. Todavía se desconoce la decisión que tomará el papa sobre el futuro de estos religiosos.

La próxima semana arribarán a Chile el obispo de Malta, Charles Scicluna, y el sacerdote Jordi Bertomeu, en su segunda visita al país. Scicluna, tras reunirse en abril pasado con víctimas de curas pederastas, elaboró un informe para el Papa sobre estos hechos.

Confirmación

La congregación confirmó el decreto papal que ordena la expulsión del cura Abel Pérez, acusado por ex alumnos de sistemáticos abusos sexuales.

"He recibido de Roma el decreto de expulsión del hermano Abel Pérez emitido por la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, del Vaticano, confirmando el decreto de expulsión presentado por nuestro superior general, hermano Ernesto Sánchez", se señaló en un comunicado.

Según el portal Emol, las supuestas víctimas de Pérez, de 70 años, hasta donde se tiene conocimiento serían catorce. Pérez, natural de Villabellaco de Santullán (Palencia), habría incurrido en la misma conducta hasta el año 2000.

En los últimos 15 años, desde el caso de Andrés Aguirre, el llamado cura Tato, 80 sacerdotes y religiosos católicos han sido acusados en Chile de delitos de connotación sexual.

De ese total, 45 fueron condenados por la Justicia civil o la canónica, y de ellos, 34 tuvieron como víctimas a menores de edad.