El príncipe Felipe, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, se retiró de la vida pública este miércoles a los 96 años, pasando revista a una unidad militar en el palacio de Buckingham.
Vestido con un impermeable marrón y bombín negro, el duque de Edimburgo, que tiene el récord de longevidad de todos los consortes ingleses, asistió a un desfile de la Royal Navy.
El príncipe prestó servicio en la Marina durante la Segunda Guerra Mundial. Unos cuantos centenares de ciudadanos asistieron desde jas rejas a la ceremonia, bajo la lluvia. Su jubilación fue anunciada en mayo, un mes antes de su 96° cumpleaños, el 10 de junio.
El príncipe, famoso por su sentido del humor polémico y a veces inoportuno, ha estado caminando durante décadas dos pasos por detrás de su esposa Isabel II, apoyándola desde que accedió al trono en 1952. "Es una mezcla de comicidad y rigor", declaró su biógrafo, Gyles Brandreth, a la radio BBC 4.
En su carrera como consorte el príncipe Felipe ha cumplido con 22.219 compromisos individuales, 637 visitas oficiales en el extranjero, 5.496 discursos, según las estadísticas compiladas por el palacio de Buckingham.
Según un portavoz de palacio, el príncipe podrá participar puntualmente en algunos compromisos junto a la reina. "Mi primer, mi segundo y definitivo empleo es estar siempre junto a la reina", dijo hace algunos años.