La acción del hombre implicó la desaparición entre 1970 y 2010 de más de la mitad de los animales salvajes del planeta, indica el informe Planeta Vivo 2014, de la ONG WWF, publicado ayer, última evaluación de la situación en una Tierra sobreexplotada.
“Las diferentes formas de vida son a la vez la matriz de los ecosistemas que permiten la vida en la Tierra y el barómetro de lo que hacemos a nuestro planeta”, escribe el director general del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF International), Marco Lambertini.
Entre 1970 y 2010, el Índice Planeta Vivo (IPV), que mide la evolución de 10.380 poblaciones de 3.038 especies de mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces, se redujo 52%.
“Esta fuerte tendencia no da signos de disminuir su velocidad”, según la décima edición del informe, cuyos autores señalan que aún es posible actuar para invertir esta caída, así como combinar desarrollo y protección del medio ambiente.
Las zonas más afectadas son América Latina (-83%), seguida de la región de Asia-Pacífico. Las especies de agua dulce pagaron el mayor precio, con una reducción del 76%, mientras que las terrestres y marinas disminuyeron 39%.
La bajada anunciada del 52% es mayor que en los informes precedentes.