El Gobierno provincial quiere saber cómo están las empresas del transporte público de pasajeros antes de encarar la nueva licitación de la concesión ya vencida, que aún no tiene fecha.
Quiere saber cómo está el parque automotor, cuál es la situación económica y financiera de las compañías y el nivel de costos para poder determinar a cuánto habrá que fijar la tarifa y cómo será el esquema a aplicar.
Ya piensa en la posibilidad de cambiar recorridos y eliminar las vías únicas por las calles únicas, eso es calles exclusivas para los colectivos con el fin de agilizar el servicio y bajar los costos.
Pero todo esto hay que evaluarlo a partir de datos duros y ciertos. Por esta razón iniciarán en breve una auditoría a las empresas de colectivos, condición ineludible antes de avanzar en la concesión.
Lo confirmó a Diario UNO el secretario de Servicios Públicos, Sergio Marinelli.
"Para renovar la concesión tenemos que tener un servicio más barato con la misma prestación. Eso se hace cambiando los recorridos y buscando agilizar el tránsito", explicó Marinelli.
Y detalló: "Una forma de hacerlo fue con los carriles únicos que hay en las calles del centro pero no se respetan, no ha servido porque las calles son muy angostas y al final los micros se amontonan y provoca el sentido contrario".
El funcionario señaló que "ya estamos hablando con los intendentes para evaluar la posibilidad de calles únicas (vías exclusivas para micros) en la que no puedan circular los particulares".
Indicó que "hay que hacer esto y troncalizar el sistema de transporte, que es lo más eficaz", lo que implica un sistema combinado de recorridos hasta el microcentro y luego un área exclusiva en éste con un solo servicio de prestación.
Sin embargo, aclaró que "todo esto no se puede hacer sin una auditoría, por eso estamos armando un equipo para auditar las empresas".
"Queremos saber cómo están después de diez años, el estado del parque móvil, la situación financiera y determinar si tienen los problemas que nos dicen que tienen".
Explicó que el modo de aplicar esas reformas deberá evaluarse pero que el objetivo del Gobierno provincial en la próxima concesión es avanzar a un sistema que esté centrado en las necesidades de los usuarios.
Además de esto estará de por medio el factor nacional, cuyo impacto será importante.
"Por este tema vamos a tener que esperar para llamar a la nueva concesión porque hay que ver cuándo se va a instrumentar la tarjeta SUBE para todo el país como estaba previsto y los fondos que habrá disponible. Sin estas definiciones y la auditoría previa no se puede licitar, por eso no hay fecha todavía para eso", apuntó Marinelli.
Aun estando a la espera de la política nacional de transporte, el secretario de Servicios Públicos de la provincia descartó que los subsidios nacionales al sistema de micros puedan llegar a desaparecer.
Marinelli expresó: "No va a pasar algo así porque la ciudad de Buenos Aires y el conurbano son justamente los que se llevan la parte más grande, por lejos, de la torta de los subsidios, no sólo para el transporte sino para la energía y otros servicios. Si cortan esas fondos las cosas no sólo se complican aquí sino en Buenos Aires".
