Fin de la investigación

Los asesinos de Emilio Giménez admitieron el crimen, evitaron la perpetua y recibieron entre 15 y 23 años

A más de 2 años y medio del crimen del feriante de Guaymallén, finalmente el caso se resolvió este miércoles en un juicio abreviado

Cuando la Justicia estaba por poner fecha para el inicio de un juicio por jurado para ventilar el crimen del feriante Emilio Giménez (49), los autores del robo y asesinato decidieron admitir su responsabilidad y fueron condenados. Los cinco sospechosos recibieron penas de entre 15 y 23 años de prisión.

Desde hace varios días que se vienen realizando audiencias preliminares para definir las pruebas que se iban a ventilar en el juicio integrado por un jurado popular. Sin embargo, todos los abogados defensores en conjunto con los representantes de la familia de Emilio Giménez y la Fiscalía de Homicidios llegaron a un acuerdo para resolver la situación en un juicio abreviado.

De esta forma, los asesinos de Emilio Giménez recibieron una calificación más leve y evitaron así una potencial condena a prisión perpetua. En tanto que la parte acusatoria se garantizó lograr condenas contra el quinteto de criminales ante la incertidumbre de la decisión que pueda tomar un jurado popular.

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Los asesinos de Emilio Giménez fueron condenados en un juicio abreviado.

Los asesinos de Emilio Giménez fueron condenados en un juicio abreviado.

La jueza Mónica Romero dictó la sentencia para los cinco asesinos como coautores de homicidio en ocasión de robo. Por el crimen recibieron penas de 23 años de prisión para Walter Corcho Sáez (34) -fue el autor del disparo-, 18 años para Ricardo Pica Andrada (32) y Sebastián Martínez Llaneza (25); y 15 años para Cristian Rivero (52) y su hijo Gustavo Rivero (28).

Emilio Giménez y un crimen resonante en Guaymallén

El 15 de septiembre de 2022, Emilio Giménez se encontraba en el Mercado Cooperativo de Guaymallén donde tenía un emprendimiento frutihortícola.

Ese día se quedó a almorzar con un grupo de personas y en horas de la siesta salió rumbo a la casa de su madre, en las inmediaciones del club Murialdo.

En su camioneta VW Amarok tenía un bolso con $5 millones, ya que el hombre solía moverse con grandes sumas de dinero por su trabajo. La víctima detectó que dos camionetas lo estaban siguiendo y llamó a dos amigos para notificar lo que estaba pasando.

Cuando realizaba el segundo llamado fue encerrado por los vehículos -una Jeep Renegade y una Toyota Rav-. De uno de ellos se bajaron los asaltantes esgrimiendo un arma de fuego, pero Emilio Giménez hizo marcha atrás tratando de escapar e impactó al otro rodado.

La situación terminó con los ladrones efectuando un disparo que impactó en el tórax del empresario y huyendo sin el botín que buscaban.

La investigación develó que hubo un trabajo logístico previo y de seguimiento por parte de los ladrones. Los Rivero, padre e hijo, vigilaron a la víctima fatal del crimen cuando salió de la feria de Guaymallén con la suma de dinero. Estos hombres, al igual que el Corcho Sáez, estaban vinculados fuertemente a la barrabrava de Independiente Rivadavia.