Cerca de las 23 del 21 de mayo de 2020, dos ladrones irrumpieron en la casa ubicada sobre el carril Barriales, ya en territorio de Junín. Allí golpearon y maniataron al matrimonio que estaba en lugar, dejando a Víctor Carlos Gruini en el patio trasero, con un trapo en la boca y graves golpes producidos con algún elemento duro, como un palo o un hierro. Minutos después llegó una de las hijas de la pareja, de 38 años, quien también fue reducida y violentada. Los autores de asalto violento huyeron con dos cheques y 80 mil pesos en efectivo. Gruini murió producto de las lesiones.
Carlos, el hijo de la víctima, repasó el expediente y recordó que, a la mañana siguiente del homicidio, "un perro de la policía siguió un rastro hasta la casa del imputado", que fue detenido. Pero, pocas semanas después, "se le dio la libertad porque se consideró que esta prueba no era suficiente".
Además recordó que, tiempo después, Eric Adrián Suazo volvió a ser detenido en esta causa "debido a una escucha, debido a una intervención telefónica. Este hombre recibió el llamado de su suegra, que le pedía el hierro (posiblemente el mango) de una pala. Él le dijo: ´debe estar por ahí y la suegra le pregunta si con ese hierro fue que mató a mi padre, y el responde que si".
Suazo, entonces, volvió a la cárcel. La defensora oficial comenzó a solicitar el cese de la prisión preventiva. "Tuvimos dos audiencias por eso el año pasado y otras dos este año", dijo Carlos Gruini (h). Primero la justicia rechazó rechazó esos pedidos pero, hace algunas semanas, finalmente un juez aceptó el pedido y le concedió la prisión domiciliaria alñ imputado, pero dejándolo sujeto a la causa.
"El juez Eduardo Orozco consideró que el audio no es una prueba suficientemente fuerte", sostuvo el hijo de la víctima.
Por esto la familia pidió adherir a la caravana de este jueves, para tratar de evitar que el caso quede impune.