Finalmente la estrategia defensa del empresario viñatero Dionisio Nazar Elmelaj (57) no prosperó. La Justicia confirmó la elevación a juicio del expediente que lo tiene sindicado como el asesino de Emir Cuattoni (15) a mediados de 2016 en Godoy Cruz.
Los abogados defensores se habían opuesto al fin de la investigación primaria asegurando que faltaban pruebas por producir. Desde el momento de la detención de Elmelaj sostienen que el adolescente murió por un presunto caso de mala praxis ya que estuvo 42 días internado y no por el disparo que recibió.
En la última audiencia, el abogado Jorge Cantalejos indicó que la historia clínica que se adjuntó al expediente no estaba completa. Para el letrado faltaban los registros de enfermería y las indicaciones médicas.
El juez Eduardo Martearena se tomó varios días para leer el documento y definir al respecto. Finalmente, hizo lugar parcialmente al recurso de apelación ordenando a la fiscal Claudia Ríos que solicite en forma urgente la historia clínica original.
No obstante, para el magistrado esta prueba no varía en que Elmelaj debe responder en un juicio oral y público bajo la calificación de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, por lo que quedó confirmado el cese de la investigación primaria.
Larga investigación
Por la muerte de Emir Cuattoni estuvo detenido más de un año el metalúrgico Gustavo Hernán Seré (38), quien recuperó su libertad en una audiencia realizada el primer día de noviembre pasado, misma jornada en la que fue detenido Elmelaj y uno de sus hijos, quien luego recuperó su libertad.
En un allanamiento en su casa de Chacras de Coria se halló el arma homicida y las llantas de la camioneta en la que se habría trasladado el presunto asesino al momento del hecho.
Según la versión de la Fiscalía de Homicidios, el 17 de abril de 2016 los dos hijos de Elmelaj andaban en bicicleta cuando sufrieron un robo. Llegaron a su casa llorando y le comentaron lo ocurrido a su padre. El hombre los subió a su camioneta y salieron a buscar a los ladrones.
En el Parque Benegas se encontraron con Emir Cuattoni y un amigo caminando con una bicicleta. Frente a sus hijos, el sujeto tomó una pistola y efectuó el disparo que semanas después terminaría con la vida del adolescente de 15 años