Pasaron más de diez años desde que las hermanas Tarqui murieron atropelladas en Guaymallén, pero el hecho sigue teniendo secuelas judiciales. Este jueves se ordenó el pago de una millonaria indemnización para la familia de las víctimas fatales. En total más de $12 millones.
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Cerca de las 6 del 12 de noviembre de 2009, Sandra (17) y Liliana (26) se encontraban haciendo footing por calle Tirasso al 5600. En ese momento fueron embestidas violentamente por un Fiat Uno y perdieron la vida al instante.
El conductor, Cristian Andrada (30), huyó de lugar del hecho pero fue detenido en horas de la tarde en su domicilio. En su vehículo se encontraron vasos con alcohol. Meses después sería sometido a un juicio donde fue encontrado culpable pero quedó en libertad.
En noviembre de 2019, recuperó la libertad luego de pagar una fianza de $20.000, aunque fue imputado por homicidio culposo doblemente agravado: conducción imprudente y pluralidad de víctimas.
El dosaje de sangre que se realizó cuando fue capturado determinó que tenía 0,50 gramos de alcohol en sangre. Los peritos determinaron que al momento del hecho el número era de entre 1,30 y 1,60, es decir, casi el triple de lo permitido por ley.
Pelea civil
Los padres de las víctimas fatales, también en representación también del hijo de Sandra Tarqui -tenía 4 años cuando murió su madre-, iniciaron una demanda civil reclamando una indemnización por el hecho.
En primera instancia, un fallo condenó a Andrada a pagar más de $4 millones a la familia pero también excluyó a la compañía aseguradora.
La empresa se lavó de culpas indicando que su cliente manejaba ebrio, no tenía el pago de la poliza al día y hasta que no hizo la denuncia de siniestro.
Sin embargo, tras apelaciones de la parte, este jueves se dio vuelta ese fallo. Las camaristas civiles Alejandra Orbelli, Silvina Miquel y Marina Isuani modificaron la sentencia.
En primer término consideraron que la compañía debía responder ya que no estaba probado que al momento del hecho Andrada estuviera alcoholizado. Si bien el dosaje dio positivo cuando fue detenido, indicaron que no era prueba suficiente ya que pasaron 6 horas desde el choque hasta ese examen.
También tuvieron en cuenta que la póliza de seguro estaba vigente hasta cuatro día después del siniestro fatal.
Además, las magistradas aumentaron el monto de la indemnización en más de $12 millones -más intereses-, monto que deberán afrontar el conductor y la compañía si la sentencia queda firme -aún pueden apelar ante la Suprema Corte de Justicia-.