Las películas de X-Men de 20th Century Fox nunca han mostrado el atuendo de los cómics -salvo la escena final alternativa de Wolverine Inmortal (2013)-.
El filme de 2017 de James Mangold, despedida de Hugh Jackman como el mutante de Marvel, no fue la excepción a la regla. Tampoco mostró a Wolverine en su traje amarillo. ¿Pero por qué? El director nominado a un Oscar en la categoría de Mejor guión adaptado explicó el motivo durante la promoción de su último trabajo.
"Logan es el menos narcisista de todos los superhéroes ¿Quién se pone un traje tan característico cuando hace buenas acciones? ¿Y por qué? La única razón por la que lo haces es para poder reivindicar una marca y para obtener un reconocmiento por lo que has hecho. Nada parece menos propio de Wolverine que el deseo de llevar un atuendo distintivo, en particular uno de color amarillo canario, y además pavonearse por hacer buenas acciones para que la gente diga: "¡Oh, Dios mío! ¡Es Wolverine!". Al menos para mí, ser Wolverine siempre ha sido una auténtica lucha y siempre lo será. Si le pusiéramos a Hugh Jackman uno de estos trajes, a la gente no le gustaría. Es algo que vive en los cómics y no estoy seguro de que pudiera mantenerse en otro sitio".