El lugar del encuentro, un consultorio psicoanalítico. Los personajes, un doctor con un gran dominio en temas relacionados con la psiquis humana y un paciente con un complejo de Edipo tan grande, que “…hasta el mismo Edipo le recomendaría terapia…”. El paciente poco a poco irá sacando de las casillas a un doctor muy resistente a desbordarse a pesar del desfile de ocurrencias y situaciones, insólitas y desopilantes
En este carril, ambos personajes se disputarán el protagonismo de la escena desandando con mucha inteligencia y humor temas como la incomunicación familiar, los condicionamientos sociales, la hipocresía, la soledad, la sexualidad y una velada crítica al psicoanálisis.