Heidi Klum y Seal se separaron en enero y la supermodelo está preocupada por lo que su ahora ex media naranja pueda revelar acerca de la pareja.

Llevaban siete años de convivencia y tienen varios hijos en común.

Poco después de anunciar la ruptura, Seal habló de la separación en varios programas de televisión, al entender que una pareja con una repercusión social como la suya, que renovaba votos matrimoniales en público cada año, debía dar una explicación también pública.

A la maniquí alemana no le han gustado nada esas apariciones y por si las moscas (del morbo) hacen estragos, parece ser que ha pedido a sus abogados que en los papeles del divorcio incluyan una cláusula "que impida a ambos hacer públicos los detalles de su vida matrimonial", según publica el diario Daily Star.

En alguna ocasión, ambos se deleitaban aludiendo a sus buenas relaciones sexuales, al respeto y cariño que se profesaban. Pero las cosas se terminan y a los hijos hay que protegerlos. Heidi y Seal son padres de Henry, de 6 años; Johan, de 5, y Lou, de 2; a los que se suma Leni, de 7, fruto de la relación anterior de la modelo con Flavio Briatore -ex mánager y propietario italiano de Fórmula Uno- y adoptada por el cantante.

 Embed      
 Embed      
 Embed      
 Embed      
 Embed      
 Embed