Llegado desde Montevideo, Uruguay, donde dirige la Banda Sinfónica de Montevideo, y director de la Opera del Teatro Solís de Montevideo, Martín Jorge -distinguido como Joven Artista de la UNESCO por la Paz en 1999- de tan sólo 43 años será quien dirija este sábado 18 de mayo a la Orquesta Filarmónica de Mendoza, recién llegada de su gira por Uruguay, donde se presentó por primera vez en el exterior, en el Teatro Solís de Montevideo, con gran éxito.
Ligado a la música orquestal en principio a través de la Opera, estuvo 14 años en El Salvador trabajando con la música en un proyecto de desarrollo en barrios marginales, para sacar a niños de la violencia.
Discípulo de grandes maestros del arte de la dirección orquesta como Zsolt Nagy Piero Bellugi y Alfredo Rugeles, Martín Jorge señala que "la dirección es una disciplina única en la práctica musical porque el director es el único que no produce sonido en el concierto, por eso es muy importante con quien uno estudia, ya que estos maestros marcan una impronta”.
En cuanto al concierto que ofreció la Filarmónica de Mendoza en Montevideo, Jorge destacó: "la obra que eligieron fue de más a más; esta Orquesta me parece un grupo muy profesional, sólido, solvente, que logra buen sonido y homogéneo. Una Orquesta de estas características permite hacer música, no sólo tocar, es decir, transmitir lo que buscaba el compositor en esta interpretación".
Sobre la presentación de este sábado, el público se encontrará en primer lugar con un solista de lujo, Néstor Garrote, solista de la Filarmónica de Buenos Aires, uno de los más grandes oboístas de Argentina. El concierto tendrá una primera parte dedicada a la música de Mozart, y la segunda las Danzas Sinfónicas de Edvard Grieg.