Quizá no sea tan sorprendente que las búsquedas de la palabra "andrógino" se disparasen en el diccionario on line Merriam-Webster tras la noticia de la muerte de David Bowie. La gente deseaba conocer mejor el significado de un término muy empleado para describir el estilo único de la estrella del rock. Pero si bien la palabra describe con precisión el atractivo camaleónico de Bowie, hay otro aspecto relacionado con Bowie, más profundo todavía, mencionado por muchos tras la muerte del artista: la idea de que el cantante ayudó enormemente -quizá al punto de salvar vidas- a numerosos jóvenes que no estaban seguros de su identidad o de su sexualidad en una era en la que la fluidez de género estaba mucho menos aceptada que hoy. "David Bowie le mostró a esta chica rarita de Baton Rouge que los rebeldes de género son fabulosos", tuiteó la cantante y compositora Mary Gauthier, de 53 años, quien explicó en una entrevista que había descubierto el famoso personaje de Bowie Ziggy Stardust -una estrella del rock alienígena, con cabello rojo y ambigüedad sexual- en su álbum de 1972 The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars cuando tenía 14 o 15 años. "Era muy consciente de que era una rebelde de género", explicó. "Ser andrógino no quedaba bien en Baton Rouge en 1974 o 1975. Andaba con gente fuera de lo normal. Bowie les dio esperanza, me dio esperanza".
Bowie murió el domingo a los 69 años, tras 18 meses de lucha contra un cáncer de hígado que no se había hecho pública. Al día siguiente, en muchos lugares se decía que Bowie hizo que quienes se sentían diferentes fuesen más aceptados.
Una de las que experimentaron esa sensación fue Madonna, que habló sobre la imagen andrógina de Bowie y cómo había sido una ayuda para ella cuando era joven.
"Nunca sentí que encajara durante mi adolescencia en Michigan", escribió en Facebook la estrella del pop. "Como un bicho raro o un monstruo. Fui a verle en concierto... Después nos descubrieron y estuve castigada. No me importó. Ya tenía muchos de sus discos y me inspiró mucho la forma en que jugaba con la confusión de género". Por su parte, el cineasta Guillermo del Toro tuiteó que "Bowie existió para que todos nosotros que no encajábamos supiéramos que una anomalía era algo precioso. Cambió el mundo para siempre".
Como muchos señalaron, no se trataba de la propia orientación de Bowie. A lo largo de varias décadas hizo un par de declaraciones contradictorias sobre su sexualidad, pero el artista, que tuvo dos hijos, llevaba más de veinte años casado con su esposa Iman cuando murió y antes había estado casado con una modelo y actriz. La cuestión era la sensación de liberación que dio a otros.
"David Bowie siempre tendrá un lugar especial en los corazones de muchas personas LGBT", dijo Sarah Kate Ellis, directora ejecutiva y presidente de GLAAD (un acrónimo para referirse a homosexuales, bisexuales y transexuales). "Era una luz para aquellos que se sentían alienados por su identidad de género u orientación sexual, ayudó a muchos a comprenderse y aceptarse a sí mismos, desafió constantemente las normas de género y demostró que ser diferente no sólo está bien (sino que) es algo de lo que se debe estar orgulloso".