Cómo una medida extraordinaria, el gobierno nacional estudia imponer al sector privado el pago de un bono de 5.000 pesos para los trabajadores, tal como lo hará el Ejecutivo con los empleados públicos, tal como lo adelantó el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica.

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Desde distintos sectores de economía de Mendoza, se alzaron voces opinando sobre esta posible medida, que aún está en proyecto, incluyendo también el monto. Para unos no sería malo -instrumentándose adecuadamente- y para otros, es directamente imposible.

No es que no se quiera, no se puede

El presidente de la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), Daniel Ariosto, fue enfático al rechazar la idea, luego de deliberarlo este martes toda la tarde con los asociados a la entidad que lidera. "No es que no queramos, si no que no podemos. Esa es la más sincera verdad. Nosotros estamos buscando sostener la planta laboral, porqué alguno de los jóvenes que pierden el empleo, en la calle no encuentra nuevamente trabajo, está muy difícil, y estas medidas lo hacen más dificultoso aún", expresó.

“Es muy difícil para la empresa que está en la economía formal -el que trabaja en negro no tiene ningún problema- esta medida sería la frutilla del postre” “Es muy difícil para la empresa que está en la economía formal -el que trabaja en negro no tiene ningún problema- esta medida sería la frutilla del postre”

Daniel Ariosto, presidente de UCIM

Ariosto dijo que en UCIM piensan que "si la medida de dar el bono es para bien de los empleados, está justificado". Pero en confianza aclaró que "sabemos todos que con esto no le salvamos la vida a nadie. El problema que hemos discutido para las Pymes, es que ya llevamos una mochila los que estamos en la economía formal. Hay un combo de impuestos, que han llegado a ser 168 los que se pagan al Estado".

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Para ser gráfico, Ariosto apeló a una imagen creada por economistas méxicanos, donde se representa a las empresas como una vaca. "Cada impuesto es una rodaja que se le saca a la vaca. Impuesto al cheque, una rodaja... El IVA, otra rodaja, y así hasta que sólo nos ha quedado el cuarto trasero de la vaca. ¡Trabajamos seis meses para el Estado; los otros seis tratamos de equilibrar para sobrevivir", dijo el empresario hotelero.

El comercio no descarta la idea del pago

Otro  que manifestó su opinión, y si bien no se declaró en contra, dejó entrever la imposibilidad de hacerlo, fue Adrián Alín, de la Cámara Empresaria, Comercio, Industria, Turismo, y Servicios (Cecitys). “Esto aún no está determinado. Pero si fuera así, esto sería imposible pagarlo. No podemos absorber esos 5.000 pesos", anunció el comerciante, que sin embargo manifestó que la idea serviría para una reactivación económica al decir: "Que nos gustaría, con mucho gusto, porqué incentivaría el consumo. Esto no quiere decir que esa plata no se redistribuya en los mismos comercios, pero hoy en día, la situación económica y la caída de las ventas, que siguen para abajo, nos hace que sea imposible pagar ese bono".

Ahondando en la idea del gobierno nacional, Alín analizó en una entrevista a Canal 7: "Si esto viniera bien articulado, como el bono de los 2.000 pesos, donde descontaron con el formulario 931, y que el Estado se haga cargo en parte de todo esto, por supuesto que si estamos de acuerdo en pagarlo, ya que, reitero, todo vuelve al consumo".

Sin embargo la grave situación del comercio en general fue ilustrado de la siguiente manera: "El aguinaldo, que se debe pagar en junio o julio, se está pagando en 3 o 4 cuotas, y el mismo empleado y colaborador, está de acuerdo porqué ve la situación que estamos viviendo. Ayudan a mantener los comercios abiertos", dijo Alín.

El presidente de la cámara empresarial mendocina explicó que existen otros factores, además de las reducciones en las venta, y dijo: "La gran presión tributaria y la de distintos sectores, como por ejemplo, están llegando cartas documento desde AADI CAPIF, a una zapatería, por la música que se escucha en el lugar", dijo con disgusto, y agregó: "Ellos (AADY CAPIF) lo toman como un servicio, y nosotros no pensamos que se van a vender más zapatos porque se ponga música. Si ayuda a que el empleado esté más cómodo en su trabajo", enfatizó.

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