Entre los cinco primeros parques nacionales de China, el Parque Nacional Fuente de los Tres Ríos en la provincia de Qinghai y el Parque Nacional del Panda Gigante, que se extiende por las provincias de Sichuan, Gansu y Shaanxi, son hábitats importantes para el gran felino, clasificado como vulnerable por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
En los últimos años, los departamentos de silvicultura y pastizales y grupos privados como el Centro de Conservación Shan Shui han llevado a cabo investigaciones y proyectos de seguimiento a largo plazo sobre el animal y su hábitat.
En 2019, la oficina de gestión de la Reserva Natural Nacional Wolong en Sichuan hizo públicas las imágenes de una cámara infrarroja de 2018, que mostraban las actividades de una hembra de leopardo de las nieves y sus tres cachorros, y daban información sobre sus habilidades de supervivencia.
Las imágenes revelaron que los leopardos de las nieves en la región de gran altitud de Wolong pueden aparecer en números mayores que el promedio, señaló la Oficina de Gestión del Parque Nacional del Panda Gigante.
“Esto demuestra que en la zona que rodea a los leopardos hay abundantes fuentes de alimento, una población sana, buenas condiciones de vida y una alta densidad regional”, agregó.
Los proyectos de conservación brindan oportunidades laborales para los lugareños, quienes pueden convertirse en administradores de reservas, investigadores, guardabosques, guías y educadores en monitoreo de vida silvestre, conservación y educación sobre la naturaleza.
En 2011, el Centro de Conservación Shan Shui y la Universidad de Pekín se asociaron para iniciar trabajos de conservación en Yunta, una aldea en la ciudad de Yushu, Qinghai.
Un equipo de 14 pastores dedicados de Yunta formó un equipo de monitoreo del leopardo de las nieves, y todos los miembros fueron equipados con cámaras infrarrojas y capacitados en operaciones de campo. El año pasado, el seguimiento conjunto de pastores e investigadores reveló que un promedio de 14 leopardos de las nieves adultos habitaban la zona anualmente, informó el centro