Según informó el sitio, minutouno.com, se suponía que cada vez que Jorge saliera a la superficie los biólogos del Centro de Recuperación de Fauna Marina del Aquarium de Mar del Plata podrían registrar dónde estaba. Así se confirmó que llegó a fines de julio a Brasil, pero la señal de su telémetro se apagó a la altura de Río de Janeiro.
Jorge, que tiene unos 60 años, nació en algún lugar entre Salvador de Bahía y Praia do Forte, en el norte de Brasil, pero pasó cuatro décadas en una pecera en el acuario de Mendoza, que cerró sus puertas en 2022.
Tras el cierre del establecimiento, el tortugo fue enviado a Mar del Plata para su readaptación, y el 11 de abril pasado logró dar el gran salto desde una embarcación de la Prefectura Naval Argentina para iniciar así su largo periplo, del que solo le falta recorrer 1.600 kilómetros.
Tortugo Jorge: ¿dónde está?
El biólogo Alejandro Saubidet, director científico del Centro de Recuperación en Mar del Plata, explicó que el tortugo Jorge se encuentra en una zona con mucho tráfico marítimo, lo que trae peligros como la contaminación del agua o los accidentes.
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¿Dónde está el tortugo Jorge? Los biólogos que monitorean al tortugo Jorge están preocupados porque desde hacen días le perdieron el rastro en Brasil.
"Lo más fabuloso ha sido el tiempo de rastreo que se le pudo dar, la batería había funcionado muy bien, pero dentro de la bahía de Guanabara (Río de Janeiro), hay mucha interferencias, no es bueno que se haya metido ahí", señaló el biólogo, que de hecho aclaró que "están las compañías navieras y los centros de conservación de especies marinas de Río Janeiro avisados de que Jorge llegó allí, por si alguien lo ve".
Siempre puede ser que el primer "silencio de radio" se haya dado por un desperfecto técnico del aparato adosado al caparazón de Jorge, pero los biólogos están alerta. De todos modos, Saubidet y su equipo saben que los casi cuatro meses de rastreo de Jorge son un hito.
"Sabíamos que podía dejar de emitir señales en algún momento. Es el ejemplar que más hemos podido monitorear, en el caso de los pingüinos no supera el mes, este control satelital", explicó el biólogo, para quien fue "muy bueno y poco habitual a nivel mundial, que haya llegado a Brasil y que pudiéramos tener tanta información".