Una frontera en medio de la cordillera, dos países inventados y unos guardias de fonteras que rozan lo ridículo. Roca Pelada, el libro de Eduardo Fernando Varela es capaz de sacar varias sonrisas desde el primer momento.
Roca Pelada: un libro con una historia tan irónica y absurda que atrapa
Con algunas ironías muy al estilo del Negro Fontanarrosa, la novela cuenta las peripecias que deben vivir un grupo de guardias de frontera en un punto olvidado.
Discusiones por meteoritos "perdidos", por el robo de algunos metros de superficie e incluso por un partido de fútbol a más de 6000 metros de altura, más los recelos propios de cada actor hacen de esta novela algo que atrapa desde el primer momento.
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Eduardo Fernando Varela es el autor de esta novela que, en realidad forma parte de una trilogía cuya última parte podría llegar en el 2024.
"Mi intención constante es despegar todo el tiempo de la realidad, reinventarlo todo desde el principio", explicó Varela a Diario UNO, y esto tiene mucho sentido. La descripción de los personajes y de los países dan lugar a pensar en varias naciones y en diferentes tipos de ciudadanos, pero son las vivencias de cada uno lo que hace que la historia sea increíble.
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"La escritura sale de la etapa de recuerdos. Hay una experiencia inicial. En Roca Pelada tomo como experiencia un viaje que hice de Salta a Chile. Me tomé un tren desde Salta, como turista, para ir a Antofagasta y fue una experiencia alucinante", explicó el autor, quien agregó que el problema fue cuando llegó al paso de Sopemca. Al llegar allí, se le dijo que debía esperar un tren que venía del lado chileno. Lo que supo después es que ese tren demoraría una semana en llegar, por lo que tuvo que pasar ese tiempo en la línea que divide Argentina de Chile.
Roca Pelada exagera todo y esa ha sido la intención de su autor. Sus personajes viven en un clima absurdo y grotesto. El ambiente que los rodea es totalmente absurdo, como así también sus acciones y es allí donde reside la fuerza de este libro, que es una especie de continuación de Patagonia Route 203, una obra difícil de conseguir en Argentina, pero que bien vale la pena buscar.





