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La Leucemia Linfocítica Crónica es un tipo de cáncer que ataca a la sangre y suele darse en personas mayores de 50 años
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La Leucemia Linfocítica Crónica representa una enfermedad poco comprendida y muchas veces invisibilizada. Teniendo en cuenta que su curso se caracteriza por su lentitud, la ausencia de síntomas evidentes en las fases iniciales y su naturaleza impredecible provocan que muchas personas lleguen al diagnóstico de manera casual, a través de un análisis de sangre de rutina.
“El lema de la campaña global por el día mundial de la LLC es ‘Entender, decidir, prosperar’ y refleja la importancia de empoderar a los pacientes con información clara y confiable, para que puedan tomar un rol activo en su recorrido con la enfermedad”, explicó Fernando Piotrowski, un paciente con leucemia y director ejecutivo de la asociación ALMA.
Por lo general esta enfermedad suele diagnosticarse en los adultos mayores de 50 años y es más común en personas mayores de 70. De acuerdo a los especialistas, entre sus signos y síntomas más comunes se incluyen el agrandamiento de ganglios linfáticos, cansancio persistente, sudores nocturnos, pérdida involuntaria de peso, infecciones frecuentes y anemia.
En muchos casos, esta grave enfermedad no produce síntomas detectables durante años, lo que explica por qué tantas veces se detecta en estudios de control sin que se tenga una sospecha previa por parte del paciente.
Características de la enfermedad
Para los pacientes que presentan LLC, la llamada “regla de los tres tercios” una de las particularidades más difíciles de asimilar. Esto tiene que ver con que un tercio de las personas con esta enfermedad precisará iniciar un tratamiento inmediatamente después de recibir el diagnóstico, aunque otro tercio permanecerá en un proceso de "espera en observación" a través de controles que permitan hacer un seguimiento de la evolución de la enfermedad y, si ésta progresa, iniciar el tratamiento. Mientras que el último tercio nunca necesitará realizar un tratamiento.
“En ocasiones, esta situación genera cierta intranquilidad en los pacientes. El médico les dice que tienen una leucemia, pero que no hay que hacer nada al respecto, al menos por ahora. En ese sentido, siempre es bueno que los pacientes entren en contacto con otros pacientes, como al acercarse a organizaciones como ALMA, porque conociendo experiencias de otros, aprendiendo de lo que otros atravesaron, se puede llevar mejor cualquier situación que genere incertidumbre, angustia, ansiedad u otras emociones difíciles de manejar”, indicó Piotrowski.
Un dato importante a tener en cuenta es que los pacientes con LLC en Argentina enfrentan obstáculos adicionales, tanto para obtener turnos con especialistas como autorizaciones de obras sociales o medicina prepaga para realizarse estudios de control de la enfermedad, ya que estos aspectos resultan vitales para lograr el mejor manejo posible.
En lo que respecta a las terapias innovadoras, que son libres de quimioterapia y han demostrado llevar la enfermedad a niveles indetectables de 1 o 2 años, inclusive a través de tratamientos finitos, están aprobadas y disponibles en el país, aunque los pacientes en muchas ocasiones deben sortear múltiples obstáculos para conseguirlas en las obras sociales o prepagas, cuando en realidad deberían estar concentrándose en cuidar su salud y el bienestar de su entorno.
Salud leucemia análisis
En el Día de la Leucemia Linfocítica Crónica se busca concientizar para lograr diagnósticos tempranos: de que se trata esta enfermedad
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“Estamos convencidos de que el primer paso es compartir información para que haya pacientes más formados y que la comunidad en conjunto entienda mejor lo que representa una enfermedad de este tipo, se ponga en los zapatos de los pacientes, desde un lugar empático, para acompañar y ser parte de la solución”, sostuvo Piotrowski.
Por eso en esta jornada, en que se conmemora el Día de la Leucemia Linfocítica Crónica, el objetivo es crear conciencia para lograr diagnósticos más tempranos, reducir las inequidades en el acceso a la atención del paciente y garantizar que ninguna persona tenga que transitar la leucemia linfocítica crónica en soledad y sin todos los cuidados que necesita para superar la enfermedad.