También detalló que las obras se hicieron para frenar la erosión en ese sector. "Es un cauce que tiene mucho caudal. Durante las tormentas que se generaron en el verano, habían funcionado muy bien", expresó.
Sobre los motivos que llevaron a la precipitación de la estructura, Arnosti se mantuvo en la misma línea que Amstutz y señaló que "la tormenta fue de características extraordinarias. Estamos pensando que el cauce alcanzó los 200 metros cúbicos por segundo, según datos preliminares. Esto significa cuatro veces el caudal del río Mendoza".
Además de provocar un fuerte debilitamiento sobre el puente, el agua también arrasó las obras que se habían desarrollado.
El funcionario nacional aseguró que se ha pedido la emergencia por este evento y que lo que queda del puente será removido para que los escombros no impidan el paso del agua. "Estamos tramitando la acción técnica jurídica para hacerle frente a la emergencia y poder, a la brevedad, iniciar la reconstrucción del puente", dijo.